El sociólogo Marcos Santana, miembro de los Comandos de la Resistencia y que estuvo en el grupo de presos políticos liberados a cambio de entregar a las autoridades al secuestrado coronel norteamericano Donald J. Crowley, declaró que Francisco Alberto Caamaño Deñó (Francis) no pudo cargar con su propio liderazgo.

Asimismo, afirmó que Francis Caamaño fracasó al intentar unificar a todos los revolucionarios que llegaron a La Habana para unirse al grupo guerrillero que se entrenaba en Cuba.

Explicó que, sin ofender la memoria del héroe y líder de la revolución de abril y la resistencia a la intervención militar de los Estados Unidos, Caamaño capacidad ni la estructura para administrar el liderazgo y el reconocimiento que tenía, y terminó permitiendo que se dispersaran los hombres que habían ido a unírsele en Cuba.

Dijo que un militar que había alcanzado el poder en Perú, Velasco Alvarado, dijo en una reunión que en cualquier lugar donde estuviese un dominicano los peruanos y los latinoamericanos tenían que hacer una reverencia para Francisco Alberto Caamaño, por su capacidad, valentía y liderazgo.

Marco Santana reveló también que cuando la embajada cubana en México otorgó visados sólo a él y a José Ignacio Marte Polanco, sin avisar a nadie se presentó ante los diplomáticos cubanos y reclamó que los demás canjeados recibieran también el visado cubano para viajar a Cuba, especialmente al líder del MPD, Maximiliano Gómez (El Moreno).

Santana dijo que entre los Comandos de la Resistencia y el MPD había un acuerdo para que quien lograra realizar una acción exitosa y exigiera la libertad de los presos, también exigiera la libertad de los presos del otro partido, y por esa razón el MPD lo incluyó a él como preso político a ser liberado por el secuestro de Crowley.

Admitió que el Comando Antireeleccionista que llevó a cabo el secuestro estuvo dirigido por Otto Morales y Amín Abel, pero que éste último y Amaury Germán Aristy mantenían relaciones muy estrechas, y habían realizado un pacto secreto de colaborar mutuamente.

Definió como el secuestro de Crowley como de carácter humano, porque tuvieron en cuenta que el secuestrado era hipertenso y tuvieron medicamentos para él, además de que dispusieron que un médico llamado Roberto, también le ofreciera servicios. Asimismo, los secuestradores dispusieron que una persona que hablaba inglés participara en la acción, y ese fue Amín Abel, y le proporcionaron información y detalles sobre su situación.

Dijo que el secuestro fue tan bien planificado que la Policía Nacional nunca describió cómo se ejecutó ni cuáles pasos se dieron para que fuera exitoso.

Marcos Santana dijo que el jefe militar del secuestro fue Otto Morales y que el jefe operativo fue Amín Abel, y que ambos fueron ejecutados por su participación en esa acción política que tenía como finalidad la libertad de los presos políticos del régimen de Joaquín Balaguer.

Definió a Maximiliano Gómez como “una estrella”, y que al llegar el grupo a México les advirtió personalmente que debían cuidarse, porque estaban siendo observados y serían perseguidos por las autoridades de México y de Estados Unidos.

Dijo que el embajador mexicano en República Dominicana, Espartaco García, era agente de la CIA.

Santana también sostuvo que para evitar más muertos en el país, el doctor Balaguer recomendó que en vez dejarlos libres en el territorio nacional, a los 19 presos se les debía enviar al exilio.

Marcos Santana fue entrevistado por el periodista Fausto Rosario Adames, en su programa ¿Y tú…qué dices? que se transmite todos los días por AcentoTV.