El secretario de Asuntos Municipales del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Kelvin Cruz, descalificó el ex presidente de la República, Leonel Fernández, para hablar sobre supuesta compra de alcaldes.

Cruz, quien también es primer subsecretario general del partido oficialista, emplazó a Fernández para que presente pruebas o evidencias que demuestren sus infundadas declaraciones sobre compra de alcaldes.

Asimismo, acusó Fernández de desmantelar al Partido Reformista Social Cristiano, nombrando a sus principales dirigentes en su gobierno.

Entre esos dirigentes citó al José Hazim Frappier, Carlos Morales Troncoso, Marino Collante, Luis José González Sánchez, Humberto Salazar, Modesto Guzmán, Adriano Sánchez Roa, entre otros en detrimento del PRSC.

De acuerdo con Cruz, lo propio hizo el expresidente con el Partido Revolucionario Dominicano cuando firmó el pacto de las corbatas azules con Miguel Vargas Maldonado, provocando su división llevándolo a un "deterioro progresivo hasta el borde de su desaparición".

El presidente de la Federación Dominicana de Municipios (Fedomu) recordó que recientemente se puso de moda la frase “aguacates políticos” para referirse a los dirigentes que, estando en el PLD, apoyaban a su organización Fuerza del Pueblo.

De ese grupo, Cruz recordó a los legisladores Félix Bautista, Dionis Sánchez, Franklin Peña, Tobías Crespo, el alcalde Carlos Guzmán y otros dirigentes que resultaron electos en la boleta del PLD, luego de tomar posesión, fueron "sonsacados" por el exgobernante para llevárselos a su partido.

El secretario de asuntos municipales del PRM aseguró que Fernández tomó la decisión de colocar a miembros y simpatizantes de su partido político en puestos en la justicia y el Ministerio Público para garantizar la impunidad en sus gobiernos.

Asimismo, criticó a Fernández por no respetar ni acatar las disposiciones de la Junta Central Electoral con relación al retiro de propaganda política de los espacios pública provocando una "indeseable contaminación visual".

En ese sentido, Cruz calificó sus declaraciones como “desafortunadas e incoherentes y propios de la vieja política que él encabeza, de decir una cosa y hacer otra. Ese tipo de práctica es la que lo ha llevado a perder la credibilidad y que el pueblo le retire su apoyo”.

Agregó que ese tipo de pronunciamientos demuestra su desesperación política fruto de su pobre posicionamiento en todas las encuentras de renombre del país.