La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, favorita para ser la candidata demócrata en las elecciones de noviembre próximo, pidió este domingo que se respete la "voluntad" que el pueblo venezolano expresó en las urnas en unos comicios cuyos resultados aún se desconocen.

"Estados Unidos apoya al pueblo de Venezuela que expresó su voz en las históricas elecciones presidenciales hoy. La voluntad del pueblo venezolano debe ser respetada. A pesar de los muchos desafíos, seguiremos trabajando por un futuro más democrático, próspero y seguro para la gente de Venezuela", dijo en la red social X.

La vicepresidenta se pronunció poco después de las 18:00 hora local (22:00 GMT), momento en que estaba previsto que empezaran a cerrar los centros de votación en Venezuela.

El Gobierno de Joe Biden ha dejado claro que está observando de cerca los comicios y que cualquier tipo de presión política será "inaceptable", al mismo tiempo que ha expresado su deseo de que los resultados "reflejen la voluntad y las aspiraciones del pueblo venezolano para un futuro más democrático, estable y próspero".

Más de 21 millones de venezolanos estaban llamados a votar este domingo en unas elecciones consideradas decisivas, con una oposición más unida que nunca y la atenta mirada de la comunidad internacional.

El chavismo, con el candidato a la reelección presidencial, Nicolás Maduro, al frente, se juega su continuidad en el poder tras 25 años. A Maduro se enfrentan nueve candidatos opositores, entre ellos el de la principal coalición antichavista -la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)-, Edmundo González Urrutia. EFE

Pasadas las 18.00 hora local (22.00 GMT) de este domingo, como estaba previsto, comenzaron a cerrar algunos de los más de 15,000 centros de votación que fueron habilitados en Venezuela por el Consejo Nacional Electoral (CNE) para los comicios presidenciales, en los que compiten 10 candidatos.

Aunque, hasta ahora, las autoridades del CNE no se han pronunciado para confirmar el cierre de las mesas electorales, EFE corroboró que varios centros ya cerraron sus puertas, luego de una jornada de doce horas de votaciones en la que hubo una alta participación.

La normativa electoral de Venezuela establece que los centros deben permanecer abiertos mientras haya electores esperando para sufragar, un escenario improbable en numerosos puntos de Caracas que, como pudo constatar EFE en horas de la tarde, ya estaban sin colas luego de una alta concurrencia en la mañana.

Según el último reporte del comando de campaña del candidato de la oposición mayoritaria, para Edmundo González Urrutia, cuando faltaban dos horas para el cierre de mesas se había registrado una participación del 54.8 %, en un censo de casi 21.4 millones de electores.

El CNE no ofrece datos de participación y prohíbe la difusión de proyecciones de resultados antes de que la institución emita su primer boletín oficial, que se espera para la noche de este domingo.

Una vez alcanzada la hora prevista de cierre, el candidato opositor Enrique Márquez recordó que era el "momento de cumplir con el reglamento de la Ley Orgánica de Procesos Electorales y cerrar las mesas que no tengan electores en cola".

"En esta etapa nos jugamos la transparencia del proceso electoral y la paz del país. Nuestros testigos deben recibir las actas de escrutinio y hacer las auditorías en las mesas sorteadas. Es momento de invocar a la paz de un país que apostó por la vía electoral", expresó en la red social X el exdiputado, que fue vicepresidente del CNE.

En estas elecciones el actual mandatario, Nicolás Maduro, busca un tercer sexenio consecutivo en el poder, tras veinticinco años de chavismo en el poder.