Jaime Rodríguez, abogado y miembro de la Fundación Juan Bosch, declaró que la Constitución de 1963 fue liberal, abierta y garantista de derechos, que 50 y 60 años después aún siguen siendo desconocidos para la sociedad dominicana de hoy, y que apenas se mantiene el debate con la intención de que no se reconozcan esos derechos, de parte de los grupos conservadores.
Dijo que la Constitución del gobierno de Juan Bosch reconoció los derechos laborales y la participación de los trabajadores en los beneficios de las empresas. También reconoció la igualdad de derecho de los hijos dentro y fuera del matrimonio y la igualdad de derechos de los cónyuges en el matrimonio. Jaime Rodríguez dijo que muchos de estos derechos han comenzado a ser reconocidos sólo a partir del año 2000, con las leyes sobre Niños, niñas y adolescentes y disposiciones de la Suprema Corte de Justicia.
Explicó que la constitución de 1963 le reconoció iniciativa legislativa a los sindicatos y garantizó la igualdad de derechos ante la ley a todos los ciudadanos, además del compromiso del Estado para eliminar los obstáculos que impidieran esa igualdad de derechos entre los ciudadanos.
Dijo que en la Constitución de 1963 se establecieron los delitos contra el pueblo, y el primero que se produjo fue el delito de corrupción, con la sanción de la degradación pública, algo poco común, que aún hoy no ha sido restablecido.
Esa constitución también calificó como elementos antisociales el latifundio y el minifundio, y se limitó la propiedad privada en manos de extranjeros, salvo en los casos que se aprobara por parte del Congreso.
Jaime Rodríguez habló ampliamente sobre el proceso constitucional de 1963, que proclamó oficialmente el 29 de abril de 1963 la Constitución, pero que fue derribada con el golpe de Estado del 25 de septiembre, hace ahora 60 años.
Jaime Rodríguez fue entrevistado por el periodista Fausto Rosario Adames, en el programa ¿Y tú…qué dices?, que se transmite todos los días por AcentoTV, a propósito de que en 2023 se cumplen 60 años del Golpe de Estado contra Juan Bosch y su gobierno.