Francis Caamaño fue un padre tierno, responsable, que dedicó tiempo a sus hijos, que se ocupó de ofrecerles educación y ejemplo, que mostró a sus hijos el amor a la patria, y que en diciembre de 1972 hizo un encuentro con Alberto, Francis y Paola, sus hijos con Chichita, y se despidió ofreciéndoles explicaciones a sus hijos mayores de la tarea que emprendería y el compromiso con la patria, que era su gran amor y su empeño más denodado.
La revelación la hizo Alberto Caamaño, hijo mayor de Francis, en un diálogo en AcentoTV, a propósito del 50 aniversario de la muerte del héroe militar que encabezó la resistencia armada a la intervención militar de los Estados Unidos de 1965.
Explicó que sobre las memorias de su padre hay que entender que su diario de guerrilla, es un documento íntimo, que a algunos no les gustará, pero es una manera que él tuvo de expresar sus sentimientos y convicciones en los momentos supremos de su vida y de la guerrilla.
Alberto explicó que el primer intento por hacer algo desde el Estado Dominicano sobre la figura de su padre lo hizo quien lo mató, el doctor Joaquín Balaguer, al emitir un decreto que aún hoy se mantiene vigente, y que lo declara desertor de las Fuerzas Armadas.
Luego, en el gobierno del PRD, se designó la Avenida del Puerto como Avenida Francis Caamaño, y a partir de ahí vinieron muchos nombres de calles en municipios, monumentos y algunas estatuas, como la de la calle El Conde. Reveló que a su madre, Chichita se le entrega una pensión de las Fuerzas Armadas, de Caamaño como coronel, y una pensión como presidente de la República.
Alberto Caamaño dijo que hay dos cosas que hacen falta en la relación de la familia Caamaño con el Estado: 1. Que se diga oficialmente qué se hizo con los restos de Caamaño. Su familia no lo sabe, ni nadie lo conoce, y es el Estado quien tiene ese secreto, y 2. Devolverle su grado militar, por parte de las Fuerzas Armadas o Ministerio de Defensa.
Alberto Caamaño reveló muchos detalles del periplo de su familia para llegar, en 1969, a La Habana y reunirse con su padre. Dijo que en Cuba Caamaño le dio seguimiento, pese a que vivían separados de él, y con sus propias manos hizo chancletas y correas que regaló a sus hijos, además de que les obsequió un reloj a cada uno y les mostró su cariño y devoción. Su última reunión se produjo en el Parque Lenin, de La Habana, en donde ocurrió su despedida final de su padre.
Alberto Caamaño fue entrevistado por el periodista Fausto Rosario Adames, en su programa ¿Y tú…qué dices? que se transmite todos los días en horas de la noche, a través del canal AcentoTV.