El presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Eduardo Hidalgo, dijo que 4 años después, la matriculación de alumnos es inferior a los niveles previos a la pandemia, en 35,747 alumnos menos.

Con esta cifra, la ADP contradice con datos ciertos las informaciones que calificó como argumentos falsos presentados por el presidente de la República, Luis Abinader, en su discurso de presentación de las memorias de las instituciones públicas.

“En el discurso se establece que, actualmente, tenemos 2,070,000 estudiantes en los centros educativos públicos. Sin embargo, antes de la Pandemia, en el año escolar 2019-2020, la matrícula escolar fue de 2,105,747. Por lo tanto, 4 años después, la matriculación de alumnos, es inferior a los niveles previos a la pandemia, en 35,747 alumnos”, precisó Hidalgo.

Explicó que, en realidad, de las más de 10,000 aulas que faltaban en el año 2020, sólo se han logrado construir 1,787. Agregó que igualmente, este dato revela que las nuevas aulas construidas albergan a un promedio de 35 alumnos por salón, lo cual viola los limites del diseño curricular dominicano y hace imposible un desempeño docente eficiente, al igual que imposibilita la creación de ambientes conducentes al aprendizaje.

El nivel de fabulación y de invento en este discurso presidencial llegó al extremo de plantear que se ha puesto especial atención a la construcción de infraestructura para atender a los estudiantes del Nivel Inicial, declarando que al 2020, la tasa de cobertura para este nivel era de 35.67 % y en 2022 subió a 63.6 %, siendo esto un dato totalmente falso, ya que, en el año escolar 2019-2020 la tasa de cobertura del nivel inicial fue de 52.2% y al año escolar 2022-2023 había disminuido a un 31.2 %, aseveró Hidalgo.

El presidente de la ADP dijo que para hablar mentiras y comer pescado, hay que tener mucho cuidado, “porque miren este caso: el presidente admite que sin libros de texto la educación no puede ser de calidad y admite que, hasta 2023, los libros no estaban llegando a tiempo a las escuelas”.

Hidalgo consideró que al final, el Proyecto Libro Abierto ha resultado ser un fracaso, ya que, los libros de texto no han cumplido con los Estándares de Calidad Editorial, no han sido suficientes, no han llegado a tiempo, han sido muy mal elaborados y no han significado ningún ahorro económico, ya que, ahora, salen 12% más caros que antes.