La importancia de la relación tecnológica entre Estados Unidos e India radica en su impacto en el futuro de la industria. India detenta el potencial para ascender como líder global, emergiendo como un importante aliado para Estados Unidos en suministros, innovación y proyectos conjuntos.
La colaboración entre ambos países se intensifica, gracias a iniciativas respaldadas por los asesores de seguridad nacional de ambos países. Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional del presidente Biden, ha fortalecido esta cooperación bilateral con su reciente visita a su homólogo indio.
Un posible desenlace inmediato de esta colaboración sería la creación de un corredor tecnológico, un espacio común para la innovación y el desarrollo que impulse empleo y crecimiento en ambos países. Esta cooperación podría disminuir la dependencia de Estados Unidos de China, factor de especial relevancia dadas las crecientes tensiones entre ambas potencias.
Según Hemant Taneja, CEO de General Catalyst, "las empresas de Estados Unidos deben percibir a India no solo como una fuente de trabajo de bajo costo, sino como un auténtico centro de innovación. Este cambio en la percepción permitiría a India desarrollar su capacidad local en sectores emergentes como la inteligencia artificial y la atención sanitaria".
Lograr este avance demandará una relación más estrecha con Estados Unidos, tanto a nivel gubernamental como privado. "La conexión entre países es crucial para el desarrollo tecnológico futuro y, para lograr esto, es necesario que ambos trabajen en la modernización de las políticas comerciales y fomenten un sistema transparente de intercambio de tecnología e innovación entre ellos", indicó Saneja.
Con una economía abierta y un sólido sector tecnológico, India se convierte en el socio más importante para Estados Unidos en términos de geoeconomía. Conforme el ámbito tecnológico mundial se desvincula, Estados Unidos requerirá del apoyo de India para alcanzar su máximo potencial en esta área.
¿Qué implicaciones tiene esto para la República Dominicana? Existen consecuencias inmediatas, pues nos indican las brechas que debemos superar.
En primer lugar, su posición de nearshore podría verse afectada por la debilidad del inglés como segunda lengua en su población. Este desafío ha sido asumido por el presidente Abinader, quien ha impulsado una reunión con representantes de la academia, el sector privado y prestigiosos institutos de enseñanza del inglés, con el objetivo de formar una alianza plural y abierta para diseñar una estrategia nacional de educación bilingüe.
Además, la insuficiencia en las habilidades matemáticas, evidenciada por los resultados de la prueba PISA (que evalúa competencias y conocimientos de estudiantes de 15 años en lectura, matemáticas y ciencias), constituye un desafío urgente para los planes de convertirnos en un 'hub tecnológico' del Caribe.
En segundo lugar, la República Dominicana podría convertirse en un socio comercial de infraestructura para las operaciones de India. Esto permitiría una participación en este escenario potencial, aunque no necesariamente un liderazgo. Entendemos que las iniciativas actuales pueden moldear esta opción para beneficiarse de lo que tradicionalmente ofrecemos: hospitalidad.
La relación tecnológica entre Estados Unidos e India es esencial para el futuro de la industria a nivel global. También resulta crucial para el desarrollo de la República Dominicana, que debe esforzarse y evaluarse para reducir no solo las brechas digitales, sino también las humanas, que nos permitan conectarnos con los flujos globales actuales.