Una de las creencias más difundidas sobre el régimen del tirano Rafael Leónidas Trujillo Molina (Chapita), oscuro período de más de 31 años de gobierno dictatorial en la República Dominicana, es el supuesto pago de la deuda externa. Como era de esperarse, hasta el congreso nacional de ese entonces, año 1947, declaró a Trujillo “Restaurador de la independencia financiera”.

Para entender lo que sucedió con la deuda externa en el año 1947 es necesario remontarse hacia al año 1905, cuando el Estado Dominicano de manera forzosa, cedió a Estados Unidos el control de las aduanas, para que el gobierno de ese país se cobrara la deuda que el gobierno dominicano tenia con esa potencia. En ese contrato se estableció que el 45% de las recaudaciones aduaneras estarían destinadas al pago de la deuda con EE.UU, y el resto, 55%, correspondía al Estado Dominicano.

Desde la llegada al poder, en el año 1930, el tirano Trujillo comenzó a hacer gestiones para lograr que le devolvieran las aduanas al Estado, y es en el año 1940 que se suscribe el tratado Trujillo-Hull, entre el dictador dominicano y el secretario de Estado norteamericano Cordel Hull, compromiso que significaba que el país debía pagar la deuda que en ese momento tenía con Estados Unidos.

Mediante la Ley 1484 del 18 de julio, se identificaron los recursos para el pago de la deuda, pero resulta que del monto total de la misma que era de US$9,271,855.55, del presupuesto público salieron US$1,000,000.00 y los demás US$8,271,855.55 restantes, fueron obtenidos mediante emisión bonos a nombre de tenedores bursátiles, los cuales tendrían un vencimiento a 17 meses y a una tasa de interés de 5%. Esto significa que para el pago de la deuda externa se contrajo otro tipo deuda externa.

Luego, a partir de la nacionalización del National City Bank, que se convirtió en Banco de Reservas, de propiedad estatal, en el año 1941, el gobierno de Trujillo utilizó los recursos de este banco para pago de los compromisos de los bonos contraídos; para mes de junio del año 1947 el efectivo del Banco de Reservas era de US$29.9 millones y US$31.6 millones los depósitos de ahorros y ya para el mes de agosto el efectivo se había reducido a US$18.9 millones y a US$30 millones respectivamente.

La decisión del cambio de la deuda por bonos y deuda interna influyo para que los compromisos sobre la deuda pública pasaran a ser un 38% del presupuesto público.

Otro dato para despejar la duda sobre el pago de la deuda por parte de Trujillo, es que desde que la recaudación en las aduanas estuvo libre del control norteamericano, el déficit público aumentó a US$16.9 millones entre 1938 y 1947 y posteriormente fue de US$33.7 millones, entre los años 1950 a 1960.

A pesar de que con la fundación del Banco Central, se comenzó a emitir moneda local “el peso dominicano” y con ello fue reduciéndose la circulación del dólar, que era la moneda que de forma predominante circulaba en la economía dominicana antes del año 1947, que le dio a la economía monetaria del país una identidad.

No obstante los vaivenes de las crisis financieras y económicas en general, que se han sucedido desde 1947 hasta nuestro tiempo, la moneda dominicana es una de las que menos devaluación ha sufrido entre los países latinoamericanos. Sin embargo esto no justifica el manejo de las finanzas publicas por parte del régimen trujillista, que estaba orientado a favorecer los intereses del dictador y su familia, manejando empresas públicas como de su propiedad.

En conclusión, se debe aclarar que el Gobierno de Leónidas Trujillo, no pago la deuda publica como es la creencia casi generalizada y que más que pagarla lo que hizo fue cambiarla por deuda interna, que en definitiva profundizó el déficit en las finanzas públicas, comprometiendo la liquidez del naciente del Banco de Reservas y la emisión de dinero inorgánico del naciente Banco Central.