Transición demográfica es un concepto de movilidad cronológica de los grupos de edad de la población donde predomina una pirámide poblacional de base reducida y vértice en ampliación. Diferente al clásico triángulo de base ancha (muchos nacimientos y muchas muertes infantiles) y vértice estrecho de baja esperanza vida, típico de la economía subdesarrollada de los años 60 del pasado siglo XX.

Es decir, una pirámide poblacional que grafica la alta mortalidad infantil, materna y una esperanza de vida menos de 50.3 años. Si la demografía varía, asimismo cambia, la probabilidad de enfermar y morir de los dominicanos o sea su perfil epidemiológico.

Hoy, la esperanza de vida es 74.47 años y la edad promedio de todos los dominicanos aumentó 37.6% en los pasados 40 años. Era alrededor de 20 años en 1990 y actualmente ronda los 28.15 años. La población de la isla pasó del campo a las ciudades donde reside hoy en más del 80%. Se considera una población de adultos jóvenes con tendencia al envejecimiento moderado en edades comprendidas entre 0 a 34 años de edad, ya que estas ocupan más de la mitad de la población, específicamente el 60.63%.

Frank Moya Pons y diversos estudios del MEPyD, demuestran la importante transformación de la economía dominicana. De una economía rural de monocultivo y productos menores, ha transitado al turismo, agroindustria, zonas francas y el masivo abastecimiento del consumo de los productos de la canasta familiar.

Todos los indicadores anteriores fueron considerados en el Plan Estratégico Nacional de Salud 2030 formulado y puesto en valor recientemente en Casa de Gobierno, herramienta que ha entrado en la etapa de difusión e implantación.

Es difícil que haya nación alguna en el mundo que saliera de la pandemia con una propuesta integral, institucional y asertiva de transformación de su sector salud.

Para lograr la proeza, el doctor Daniel Rivera, ministro de Salud, contó con el completo respaldo del Poder Ejecutivo de República Dominicana, en las personas del presidente Luis Abinader y la vicepresidenta Raquel Peña. Quienes no ahorraron gestiones para apadrinar y apalancar este proceso.

El ministro Rivera Reyes se distingue para su eficiencia, capacidad ejecutiva y destreza operativa. Así lo probó en la dirección de la Escuela de Medicina de PUCMM, la Dirección del Hospital Regional del Cibao José María Cabral y Báez y la presidencia del Grupo Unión Médica del Norte de Santiago. Eso le ayudó a lograr la conclusión de la primera Agenda Estratégica de toda la historia de salud pública.

Destaca, además, el rol del doctor Pavel Isa Contreras, ministro de Economía, Planificación y Desarrollo quien desplegó todo el apoyo de este órgano del Estado para que los análisis económicos y financieros, así como las propuestas y proyectos a cargo de comisión técnica de economía de este proceso fuera coherente con la planificación plurianual que impulsa esta dependencia.

La Resolución del Consejo Nacional de Salud (CNS) 003-2023 pone en vigencia esta Bitácora o Brújula de desarrollo del sector salud.

El escenario planificado describe un teatro de operaciones que promueve hacer justo lo que debe hacerse. Se prevé que al año 2030, la efectiva implantación del proyecto de Recuperación y Fortalecimiento del Primer Nivel de Atención, sumado al diseño y puesta en operación del Plan de Recursos Humanos, favorecen una nueva prospectiva de gestión de redes de servicios que robustece la participación social y el impulso del proyecto de Ciudades y Municipios Saludables promovido por la Liga Municipal Dominicana, FEDOMU y el Ministerio de Salud.

Al 2030 se vaticina que estas iniciativas permiten aprovechar fortalezas y oportunidades del sector para robustecer las Direcciones Provinciales y Áreas (DPS/DAS) como organismos impulsores de la salud colectiva y rectores de los servicios de salud en el territorio de las 32 provincias de República Dominicana.

Al concluir esta tercera década de este siglo XXI, la población, no supera los 11 millones de habitantes como resultado de programas de fortalecimiento de la salud sexual y reproductiva; intervenciones que a su vez logran reducir el embarazo en adolescentes, matrimonios infantiles, la mortalidad materna y los fallecimientos evitables en niños y adolescentes.

La gobernabilidad y gobernanza se habrán expandido a todos los niveles del sector, asimismo sucederá con la participación social en servicios de salud y los mecanismos de veeduría ciudadana de los servicios y la gestión. Especiales resultados se pronostican lograr en la relación de rectoría del Ministerio de Salud Pública sobre el organismo regido, el Servicio Nacional de Salud (SNS).

Como resultado más del 70% de los 189 hospitales de segundo y tercer nivel de todo el territorio, registran Consejos de Administración Hospitalaria (CAH) en funciones con agenda y actas formales. Órganos que rinden cuenta a las diversas comunidades servidas.

La estrategia de municipios saludables incorpora más del 50% de los 158 municipios de la República Dominicana en la inversión en parques urbanos con buenos sistemas verdes, espacios públicos y corredores peatonales para realizar ejercicios físicos y efectuar actividades culturales de baile y relajamiento mental al conjunto de pobladores envejecientes de sus territorios.

La Liga Municipal Dominicana (LMD) y la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU) realizan la premiación anual de los municipios que se destaquen elevando la inversión publica en salud y en espacios públicos saludables en estos territorios. Elevando las transferencias vida el gabinete de descentralización de la gestión municipal.

El escenario planificado pronostica el logro de al menos 10 Rellenos Sanitarios Regionales en las diversas regiones de planificación, con áreas especiales para tratar los residuos peligrosos derivados de la atención en los servicios de salud.

Al segundo año de gestión de este Plan Estratégico Nacional de Salud 2030, el Ministerio de Salud transforma su encargo presupuestario, priorizando inversiones públicas en coherencia con el perfil epidemiológico, los Años de Vida Ajustados por Discapacidad AVAD y los Años de Esperanza de Vida Saludable al Nacer (AVES), cambiando la matriz presupuestaria anteriormente enfocada en programas del pasado cuadro higiénico sanitario de República Dominicana.

El escenario planificado proyecta igualmente, logra traspasar al Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS) y el Seguro Familiar de Salud (SFS), el Programa de Alto Costo y Ayudas Médicas; en especial de aquellas patologías catastróficas que son prevenibles. Lo anterior permite redireccionar recursos financieros especiales.

La prevalencia de hiperglicemia, sobrepeso, obesidad, índice de masa corporal, hipertensión arterial y consumo excesivo de alcohol, se reducen significativamente permitiendo un decrecimiento y descenso de más del 30%, de las enfermedades coronarias, cerebrovasculares y la diabetes. El índice de masa corporal se mantiene en valores 25 kg/ m2 y 30 kg/m2; la hiperglucemia en valores menos a 126 mg/dl y la reducción de la prevalencia de hipertensión a menos de 25% de la población adulta.

En este proceso, el Ministerio de Salud garantiza que las entidades públicas gestoras del agua de consumo monitoreen, con la participación de los organismos correspondientes, la calidad del agua consumida en los servicios de salud.

Igualmente, apertura conjunta con la Liga Municipal Dominicana (LMD), la medición de la calidad del aire en aquellas ciudades con elevada circulación vial y millones de viajes de origen y destino a los lugares de estudio y trabajo de las diversas ciudades.

República Dominicana sale de la oscura sombra de la covid-19 con la proeza del Ministerio de Salud de desatar en medio del control de esta catástrofe la fuerza prospectiva de más de 150 organizaciones para que formularon la Estrategia Salud 2030. El desafío se cumplió al elaborar junto a diversos órganos del Estado, el Plan Estratégico de Salud 2030.

Históricamente quedará registrado que en pandemia, al finalizar el 2021, cuando se desplegaba exitosamente la tercera dosis de vacunación anti Covid 19, el ministro Daniel Rivera, con mascarillas, convocó y solicitó apoyo técnico para concluir el “plan decenal”, porque la metodología empleada en el ministerio “no funcionaba”.

Joan Clos enseña que a los planes estratégicos “se asiste llorao”. Especialmente en naciones que, por hacer más de lo mismo, imponen que prevalezca sobre el futuro deseado por la gente, el más de lo mismo, el pesimismo y la incredulidad.

Clos, como epidemiólogo, cofundador de la red planificación CIDEU con sede en Barcelona, y actual director ONU-Habitat, demuestra el peso del proyecto estructurante, para deslindar lo definido como “planificación estratégica genuina”. No hay plan sin proyectos acordados y concretados.

Un auténtico plan estratégico lo implantan sus proyectos estructurantes, en este caso 35 iniciativas y 144 productos entregables, ejecutados con una gestión presupuestaria inteligente, adaptada al perfil epidemiológico nacional y de elevada gobernabilidad y gobernanza.