La pandemia ha llevado a las organizaciones de todas las industrias a adoptar nuevas soluciones digitales. Pero aunque se ha escrito mucho sobre el impacto del cambio al trabajo remoto en los empleados, gerentes y ejecutivos, hay otro grupo crítico que se ha visto obligado a transformarse de la noche a la mañana: los miembros del consejo de dirección.
Según un informe de la firma Tricor Group y el Programa de Directores de la Junta de Financial Times –a través una amplia encuesta a casi 800 directores a nivel global, reportaron que el 80 % de los directores globales creen que la transformación digital debería liderarse a nivel de junta en lugar de relegarse al departamento de TI.
Ningún grupo debe ser considerado como monolítico en su enfoque de la digitalización. Sin embargo, a medida que los consejos de dirección comienzan a mirar hacia un mundo posterior a la pandemia, puede ser útil considerar los patrones que surgieron, en específico tres formas clave en las que los consejos de dirección han luchado por adaptarse a un mundo digital:
1) Aprovechar las herramientas digitales para las operaciones del consejo
Antes de la pandemia, solo el 5 % de las reuniones de una junta directiva se llevaban a cabo de forma virtual. Durante la pandemia, ese número ha aumentado hasta el 95 %, y nuestra investigación sugiere que incluso después de la pandemia, más del 50 % de las juntas perseguirán un modelo de reunión híbrida.
Se sugiere que ser híbrido puede aumentar significativamente la eficiencia de las reuniones, lo que resulta en reuniones que son alrededor de un 30% más cortas con un 20 % más de asistencia, por lo que hay buenas razones para pensar que un modelo híbrido para las reuniones de la junta está aquí para quedarse.
2) Abordar los riesgos emergentes de ciberseguridad
Lo mencionamos en un artículo en 2021, además de aprovechar las herramientas digitales para aumentar la eficiencia de las operaciones de la junta, reforzar la ciberseguridad es otro componente clave de la exitosa transformación digital de cualquier consejo de dirección. Las organizaciones que invierten en herramientas operativas sin abordar adecuadamente el aumento de las amenazas de ciberseguridad que vienen junto con esas herramientas se exponen a sí mismas y a sus empresas a un riesgo significativo.Como resultado, el 83 % de los directores de la junta que encuestamos identificaron que la ciberseguridad era una prioridad.
3) Construir competencias digitales
La digitalización exitosa es imposible sin la competencia digital. Probablemente una de las causas fundamentales de las deficiencias descritas anteriormente tanto en las herramientas operativas como en la ciberseguridad, sea la falta de conocimiento digital y capacitación sobre el impacto de las herramientas, tecnologías y modelos de negocio digitales emergentes.
Aunque no es un desafío nuevo, la pandemia ha acelerado la necesidad de estas habilidades a nivel de un consejo de dirección.
Desafortunadamente, mientras que el 94 % de los directores encuestados dijeron que sentían que necesitaban más capacitación sobre nuevas tecnologías y mejores prácticas de gobernanza, solo el 58 % informó haber recibido esa capacitación.
4) Integrar un tecnólogo como miembro independiente
En el estudio se aprecia que el 48 % de los directores globales dijeron que considerarían añadir la experiencia independiente de terceros con perfil de asesores de gobierno corporativo, consultores y expertos en ciberseguridad y tecnología para desarrollar ese punto de vista de competencias críticas de gobernanza digital.
Sin embargo, a pesar de la necesidad de herramientas de gobernanza de juntas digitales en un mundo cada vez más híbrido, nuestra entendemos que la visión tecnológica es fundamental para la gobernanza de juntas digitales.
Pocas juntas con las que hemos conversado han actualizado sus enfoques para los procesos vitales específicos de su función, como compartir documentos de gobernanza seguros, votar o comunicar información confidencial.
Si bien existe un gran interés en aprovechar las herramientas digitales, claramente todavía hay mucho margen de mejora cuando se trata de integrar la tecnología como parte de la conversación y toma de decisiones de las organizaciones en la República Dominicana.
Ahora queda la otra cara de la moneda, lograr que los tecnólogos puedan comprender su rol y construyan capacidades que les permitan ganar un asiento en los consejos de dirección.