Introducción:

Conforme a los permanentes estudios de la Comisión de Salud del Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) las enfermedades no transmisibles (ENT) desde hace varias décadas han ocupado las primeras causas de muerte y discapacidad en el mundo, en la Región de las Américas, así como en nuestro país.

 

A nivel mundial, más de uno de cada 10 adultos vive ahora con diabetes. Además, hay una lista creciente de países donde uno de cada cinco o incluso más de la población adulta tiene diabetes. Desde la primera edición de las altas de la IDF en 2000, la prevalencia estimada de diabetes en adultos de 20 a 79 años se ha más que triplicado, de un estimado de 151 millones (4,6 % de la población mundial en ese momento) a 537 millones (10,5 %) en la actualidad. Si no se toman medidas suficientes para abordar la situación, prevemos que 643 millones de personas tendrán diabetes para 2030 (el 11,3 % de la población). Si las tendencias continúan, el número aumentará a la asombrosa cifra de 783 millones (12,2 %) para 2045.

 

El creciente número de personas con diabetes se debe a múltiples factores: las personas viven más tiempo, inactividad física, calidad en temas alimenticios etc.

 

La diabetes causó 1,5 millones de muertes en 2012 y las elevaciones de la glucemia por encima de los valores ideales provocaron otros 2,2 millones de muertes por efecto de un aumento del riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y de otro tipo. De estas muertes, el 43% se produce antes de la edad de 70 años.  El porcentaje de las muertes atribuibles a la hiperglucemia o a la diabetes que se producen antes de los 70 años es mayor en los países de ingresos bajos y medianos que en los de ingresos altos.

El riesgo de diabetes de tipo 2 se ve determinado por la interacción de factores genéticos y metabólicos. Dicho riesgo se eleva cuando factores étnicos, un antecedente de diabetes en la familia y un episodio anterior de diabetes gestacional se combinan con la presencia de edad avanzada, sobrepeso y obesidad, alimentación inadecuada, falta de actividad física y tabaquismo.

 

El exceso de grasa corporal, cuya medición refleja varios aspectos del régimen alimentario, así como la actividad física, es el factor que se asocia directamente con el riesgo de diabetes de tipo2. Se calcula que el sobrepeso y la obesidad, además de la falta de actividad física, dan origen a una gran proporción de la carga mundial de diabetes. Un perímetro de la cintura aumentado y un mayor índice de masa corporal (IMC) se asocian con un mayor riesgo de diabetes de tipo2, aunque puede ser que la relación varíe en distintas poblaciones.

 

Distintas prácticas alimentarias se asocian con un peso malsano, el riesgo de diabetes de tipo 2 o ambas cosas. Algunas de ellas son el consumo elevado de ácidos grasos saturados, una alta ingesta de grasas y un consumo insuficiente de fibra alimenticia vegetal. El alto consumo de bebidas azucaradas, que en general contienen una gran cantidad de azúcares libres, aumenta la probabilidad de sufrir sobrepeso u obesidad, sobre todo en los niños en etapa escolar.

 

Mortalidad relacionada con la diabetes:

 

La diabetes es un factor importante de mortalidad en todo el mundo, aunque su impacto varía según la región.

 

Excluyendo el riesgo de mortalidad asociados con la pandemia de COVID-19, aproximadamente 6,7 millones de adultos entre la edad 20-79 anos, han muerto como resultado de la diabetes o por sus complicaciones en 2021. Esto corresponde al 12,2% de muertes globales por todas las causas en este grupo de edad.

 

Aproximadamente un tercio (32,6%) de todas las muertes por diabetes ocurren en personas en edad de trabajar (menores de 60 anos), esto corresponde al 11,8% del total muertes globales en personas menores de 60 años.

 

¿Cuánto cuesta la Diabetes a nivel mundial?

 

Repercusiones económicas de la Diabetes

 

La diabetes y sus complicaciones generan grandes pérdidas económicas para los diabéticos y sus familias, así como para los sistemas de salud y las economías nacionales, en forma de gastos médicos directos y de una pérdida de trabajo e ingresos. Aunque la hospitalización y la atención ambulatoria representan los mayores componentes del gasto, otro factor contribuyente es el aumento del costo de los análogos de la insulina.

 

Costos directos de la diabetes:

 

Los costos directos son los gastos en salud que ocurren debido a la diabetes independientemente de si el gasto es asumido de su bolsillo por parte de personas que viven con diabetes o por pagadores públicos, incluidos los gobiernos.

 

El Atlas de Diabetes de la IDF ha incluido estimaciones del gasto en salud debido a la diabetes desde su 3ª edición en 2006.

 

El aumento en el gasto mundial en salud debido a la diabetes ha sido considerable, pasando de USD 232 mil millones en 2007 a USD 966 mil millones en 2021 para adultos de 20 a 79 años.

 

Esto representa un aumento del 316% en 15 años.

 

Parte de este aumento se puede atribuir a la mejora de la calidad de los datos. Se espera que los costos directos de la diabetes continúen en crecimiento.

 

La IDF estima que la salud total relacionada con la diabetes el gasto alcanzará USD 1,03 billones para 2030 y USD 1,05 billones para 2045. Respectivamente, se trata de aumentos del 66,4% y del 9,1% en comparación con la estimación de 2021.

 

Estas proyecciones son conservadores ya que asumen que la edad y el sexo son específicos gasto relacionado con la diabetes y prevalencia de la diabetes permanece constante, teniendo en cuenta sólo tamaño de la población, envejecimiento, cambios en la distribución por sexos y urbanización.

 

Realidad en República Dominicana:

 

EFRICARD 2 (Estudio nacional estadístico de Diabetes, Hipertensión y Obesidad)

 

El estado actual de los factores de riesgo cardiovascular en la población dominicana, dado a conocer en el estudio Efricard II, no son positivos, en especial los relacionados al aspecto cardio metabólico, que incluye factores como la Diabetes, obesidad y síndrome metabólico están muy ligados hoy en día a la enfermedad cardíaca.

 

Hipertensión arterial:

El investigador principal explico que el primer resultado del estudio es el nivel de presión arterial alta en la población nacional, un 35 por ciento, mayor en hombres (37.8) que en mujeres (32.8).

 

La hipertensión aumentó a medida que avanzaba la edad. Entre los 18 y 20 años fue de 5.5 por ciento; de 20 a 30 años, 11 por ciento y de 40 a 49 se dispara al 44 por ciento. Por encima de los 70 años, la cifra sube a 80 por ciento. Sólo el 52.5 por ciento de los hipertensos conoce su condición y se trata, 39 no la conocían y el 11 por ciento la conoce, pero se trata ocasional o no se trata.

 

Obesidad y sobrepeso:

La obesidad general en la población dominicana obtuvo 26.6% y hace 10 años, era de 16 %, con una diferencia de 3 a 4 puntos porcentuales más en la mujer que en el hombre. En el Efricard II la obesidad sigue mayor en la mujer (29%) que en el hombre (21.7%). El sobrepeso fue de 31 por ciento y la obesidad visceral de 64.4%.

 

La diabetes, que según los investigadores en 1998 se encontraba en un 5.5 por ciento, alcanzó en Efricard II el 9.9. El síndrome metabólico obtuvo un 19.3 por ciento.

 

Para  el Consejo Regional  de  Desarrollo, Inc. (CRD), esto datos conllevan a una revisión del país, pero de igual forma a un profundo análisis desde el núcleo familiar donde comienzan los hábitos alimenticios y de salud deportiva, para delinear mejores políticas para prevenir la diabetes y sus complicaciones, asimismo, brindar la mejor atención disponible a las personas con dicha afección, junto asumir sus estrategias en torno al desarrollo de nuestro sistema de salud, con el objetivo de trazar a corto, mediano y largo plazo a nivel nacional acciones sanitarias que tengan alto impacto en los diferentes estratos sociales que componen tanto la sociedad dominicana como la mundial.