Gury Abreu, ¡estamos contigo!

El lunes 12 de Septiembre, celebramos un evento que me produce mucha satisfacción, no solo por la calidad del concierto de mi “hermanito” Peng Bian y sus compartes de RetroJazz más Laura Rivera, Frank Ceara y un importante y representativo grupo del sueño que se llamó “Santo Domingo Jazz Big Band”.

 

Mi máxima satisfacción es por la conciencia de solidaridad con Gury Abreu, el saxofonista fundador de Retro Jazz –actualmente enfrentando problemas de salud. Esta solidaridad flotaba en la sala Manuel Rueda del Conservatorio de Música. No sé si pueda transmitir dicha sensación, ya que es una sensación intraducible en palabras. Como muestra, un botón: el “selfie” masivo que se tomaron los compañeros de RetroJazz en primer plano y con los cientos de asistentes en segundo plano, gritando ¡Te queremos, Gury! Y enviado inmediatamente a Gury a la velocidad de las redes sociales.

 

En palabras de Peng Bien, “agradezco a los colegas músicos presentes, porque sabemos que un artista no suele asistir a la presentación de otro. Ustedes, como nosotros, estamos aquí por Gury.” Y agregó el desapego de la Gerencia de la Sala, al no cobrar los arbitrios para que sean utilizados para los fines del concierto. Así UEPA Tickets con la comisión por sus servicios. Y una práctica, que se mantiene en la discreción, es el aporte de empresas que hicieron sin “quid pro quo” (perdonen la cursilería económica), sin compromiso de exponer su publicidad.

 

¿Será una lección para los escépticos que sostienen que la humanidad va dejando su sentido de solidaridad, traducida como caridad, filantropía o conmiseración frente al dolor ajeno? ¿Será una señal de los tiempos? Se lo pregunta un hijo testigo de unos padres que se desvivieron colaborando con el Patronato Cibaeño contra el Cáncer y con la Escuela de Educación Especial, filial de Santiago de la Asociación Dominicana de Rehabilitación. Tal vez, por lo vivido y por los tiempos actuales que vivo, es que hay que resaltar la sensación del poder del espíritu humano vivido en Retrojazzeando por Gury, esta pasado lunes 12.

 

Permítanme repetir lo obvio: en este concierto, los retrojazzeros debieron darse cuenta de que, a pesar del repertorio que estuvo conformado por viejas canciones, algo cambió. Parece que el “tempo” de los arreglos maduró y las notas denotaban la nostalgia de altos y bajos más graves y sostenidos. Como que Retrojazz se ha renovado de acuerdo al tiempo que ha pasado de  la década que lleva en el ambiente musical con proyección más allá de las playas y montañas quisqueyanas.  O, ¿soy yo el que estoy poniéndome viejo…? Las dos cosas.