Despejado por el momento el camino de la reelección de Luis Abinader, y por vía de consecuencia la continuidad en el poder por 4 años más del Partido Revolucionario Moderno, se abren amplias posibilidades de que el programa de gobierno de este partido se pueda completar impulsando las transformaciones económicas sociales y políticas que, resultado de la pandemia y la crisis económica resultante de la guerra Rusia-Ucrania, no pudieron concretizarse, además de algunos inconvenientes surgidos al interior del partido en el poder.

En efecto, las rivalidades PLD-FP se profundizan haciendo poco probable, por el momento, una alianza entre ambas organizaciones que pudieran haber amenazado eventualmente la reelección del presidente.

Además no existiendo una cuarta alternativa, el camino está trillado para consolidar lo bueno realizado (ver mi ensayo: "Picazos, realizaciones y lista de espera" Acento.com) y terminar dando jaque-mate a la oposición, evitando el retroceso político que significaría volver al PLD-FP en sus dos versiones,  cualesquiera que esta sea.

En ese tenor se impone, pues, mostrar coherencia con las políticas  verdaderamente socialdemócratas honrando así, con hechos incuestionables, la memoria de José Francisco Peña Gómez sellada históricamente en su famoso slogan "Primero la gente".

En realidad entre el 2020 y el 2024 hemos estado atravesando por un periodo de transición (Hipólito Mejía lo había acertadamente predicho).

Es pues el momento 2024-2028 para pasar a una nueva etapa en el camino de fortalecer las instituciones para que funcione realmente la separación de poderes, modernizar la economía para hacerla verdaderamente competitiva ante los desafíos que la globalización nos impone y hacer cada vez más transparente la gestión gubernamental.

En este sentido, se debe promover un gobierno que regule el interés privado evitando el capitalismo salvaje y las medidas neoliberales. Eliminar en este sector de una vez y por todas los incentivos existentes de las empresas que no los necesiten.

Fijarse como meta la profundización de la digitalización de la información en la administración pública. Y en el sector privado estimular la formalidad de los contratos inteligentes que ahorrarían tiempo, trabajo y aumentaría considerablemente las relaciones comerciales y el flujo de negocios nacional e internacional.

Trazar una raya de Pizarro con aquellos funcionarios que no ejerzan sus funciones conforme a la honestidad y transparencia de los fondos públicos. Seguir apoyando sin desmayos la política criminal del Estado llevando a la práctica la lucha contra la corrupción y la impunidad "caiga quien caiga", no solo contra los corruptos de los anteriores gobiernos, sino también contra los del actual gobierno.

Llevar a la práctica las transformaciones planteadas al inicio del gobierno reabriendo un diálogo franco y abierto con las fuerzas políticas organizadas interesadas en el cambio y de manera particular con las fuerzas progresistas de la sociedad civil que tuvieron su origen en la Marcha Verde aprobando un nuevo programa de gobierno 2024-2028, haciendo las concesiones de lugar a este sector de la sociedad, como por ejemplo las tres causales entre otras reivindicaciones que pudieran ser acordadas.

Modificar sustancialmente la Ley de Seguridad Social para que los futuros pensionados reciban una pensión decente y justa y se terminan los privilegios irritantes de las AFP, así como las barbaridades de las ARS.

Ser inflexible frente al drama haitiano preservando nuestra soberanía e identidad nacional, impidiendo la migración ilegal, pero al mismo tiempo respetando escrupulosamente los derechos humanos de aquellos hermanos haitianos que se refugian en nuestro territorio huyendo de la represión y el desorden institucional de ese país.

En lo que se refiere al PRM, capacitar urgentemente a millares de perremeistas en cursos de formación técnica a todos los niveles, incluyendo en los diferentes ministerios, para que sigan enarbolando la antorcha del cambio posible y sustituyan a los adultos mayores del PRM. De este modo paralizar las críticas que se le han venido formulando a este gobierno de manera injusta de que se está gobernando para los popis.

Evitar a toda costa los dimes y directos al interior del PRM, colocar el interés del país por encima del interés privado y en las elecciones municipales congresuales estimular las candidaturas sustentadas por hombres y mujeres capaces y honestos que estén vinculadas a la defensa de las demandas de sus comunidades .
¡¡ Álea jacta est !!