Durante los cincuenta y seis años de creación de la Defensa Civil Dominicana, una de las más antiguas entidades de emergencias del país, ha tenido trece directores, funcionarios que se han sucedido de un periodo a otro con administraciones civiles y militares.
Desde el 1966 al 1999 la institución de socorro fue dirigida por civiles, y del 1999 hasta marzo del 2021 la gestión estuvo en manos de militares. En el tiempo de existencia de la entidad se observa un recorrido por el que han pasado profesionales (civiles y militares) pertenecientes a diferentes carreras que no se relacionan con las emergencias de forma directa.
Siete directores civiles formados en derecho, ingeniería, medicina, ciencias sociales, políticas y promotores de los derechos humanos fueron directores, y cinco militares con especialidades y competencias en el ejército, logística, derecho, paracaidismo y agronomía.
La persona que dirija a la defensa civil, en cualquier mandato, solo tiene que ser honorable y respetable. Poseer vocación de servicio, íntegro, con valores morales incuestionables, con una notoriedad positiva y ser un buen gerente. Es un valor agregado que sea un profesional, pero no es una condición obligatoria que sea del sector emergencias.
Los requisitos sobre las condiciones de competencias en emergencias son importantes en alguien que dirija a la Defensa Civil, sin embargo, lo principal que se requiere para ser dirigente de una organización como esta es ser un buen administrador. Un regente que guíe correctamente a su equipo. Un líder con deseos de hacer más y actuar con los medios que se disponen, respetando al personal técnico calificado de la organización.
Para dirigir la Defensa Civil los requerimientos necesarios son el de amar el país, pensar en el bien y en la seguridad de los habitantes del territorio, y no pensar en sí mismo. Esas características anteriores son las que deben observarse como cualidades distintivas para dirigir la institución de socorro del país. Que no se cometa la torpeza de creer que los técnicos que tienen treinta años en el sistema pueden ser los únicos habilitados para dirigir una organización como esta.
De todos los directores que ha tenido la Defensa Civil Dominicana, en sus cincuenta y seis años de vida, ninguno ha llegado a ella siendo un experto en gestión del riesgo de desastres. Esos directivos crecieron durante su gestión y aprendieron hablar de la temática en la práctica, en el día a día, tal como lo está haciendo Juan Sala.
Un director, si es un buen gerente, lo primero que hace es escoger a personas calificadas como acompañantes para su recorrido. Integrar a su equipo a buenos técnicos y respeta a quienes están con él, compartiendo el liderazgo de la organización con cada uno de ellos.
El director actual de la Defensa Civil, Juan Sala, no requiere ser un experto en la temática de emergencias. Las cualidades distintivas que posee lo hacen ser un excelente gerente con sobrada capacidad, capaz de transmitir ideas y decisiones a las personas con las que trabaja.
Sala cuenta con un equipo formado durante más de veinte años en el tema, fuera y dentro del sistema nacional de gestión de emergencias, y junto a ese grupo, con las condiciones que le adornan como gerente, su gestión está permitiendo avanzar hacia la mejora del sistema nacional de emergencias, convirtiendo el potencial de su personal en un beneficio real.