A lo largo de su trayectoria seis décadas como periodista y militante revolucionario, Raúl Pérez Peña (Bacho) siempre supo poner un pie en el presente, sin despegar el otro de la memoria histórica que tanto honró y enarboló. Bacho miraba y escribía de la actualidad, teniendo siempre presente una visión de largo plazo. Eso le permitía no perder la perspectiva ante los falsos profetas y curanderos de la politiquería de nuevo cuño. En el presente artículo que presentamos aquí, publicado originalmente el 4 de mayo de 2004, Bacho escribe sobre su compañero Rafael Faxas Canto (Pipe), quien fuera secretario general del Movimiento 14 de Junio en la clandestinidad, y luego prominente dirigente de la agrupación catorcista en la etapa posterior a la caída de Trujillo. Pipe, junto a Polo Rodríguez y Juan Miguel Román, fueron las tres personas claves en la incorporación de Bacho al Movimiento Revolucionario 14 de Junio. En el momento de escribir el artículo, Bacho era candidato presidencial por el Partido por la Auténtica Democracia (PAD). No tenía recursos económicos, y libraba una batalla titánica contra la partidocracia. Pero si sacaba el tiempo necesario para escribir sobre sus inspiraciones y motivaciones para continuar por las vías legítimas la lucha de él y sus compañeros muertos, por una República Dominicana más justa y digna. Hoy, justamente en medio de una campaña electoral, más empobrecida que nunca de ideas democráticas, hemos querido volver a publicar este artículo que nos recuerda el talante de las mujeres y hombres revolucionarios que quisieron hacer de la política un ejercicio de convicciones de bien común antes que ambiciones personales.
Pipe Faxas: presente con la pauta de la vergüenza*
(Publicado originalmente el martes 4 de mayo 2004, en el Listín Diario)
La descripción precisa de Rafael Enrique Faxas Canto (Pipe) la pueden ofrecer su esposa Carmen, sus hijos Miky y Rafy, o sus hermanos Niní y Janet. También los ex presos políticos de la tiranía trujillista, o sus congéneres petromacorisanos, serie 23.
O alguien del exilio antitrujillista en Argentina, como los Valera Benítez, Luis Gómez Pérez, Abelito Rodríguez, Manuel Soriano, Sina Cabral, Queyita Santos, Hugo Toyos y otros.
De sus venas poéticas hablan sus escritos. Sus fibras artísticas están plasmadas en sus trabajos.
Traté muy de cerca al Pipe estratega político por naturaleza. Evoco ante amigos su talento, al visionario siempre enjundioso en sus exposiciones.
Pipe me “sacó” de la universidad para integrarme a la dirección del 1J4 en el Distrito Nacional. Es imposible para mí transcribir lo que debo a sus enseñanzas. Cuantos le recuerden, vincularán su “jacket” a su silueta física.
Fue el secretario general del Movimiento Clandestino 14 de Junio. Cuando cayó en las lomas orientales de La Berrenda, fusil en manos, Pipe integraba el frente Mauricio Báez de la insurrección verdinegra que buscaba rescatar la Constitucionalidad, secuestrada con el golpe de Estado a Juan Bosch. Pipe cayó cuando apenas contaba con 27 años de edad.
Él es uno de los emblemas que marcan la resistencia al oprobio y la ignominia. Viendo siempre el bosque por arriba del árbol, Pipe Faxas está presente en todos los que tenemos a honrar su memoria, y con él a la Raza Inmortal, el 1J4, clandestino, del exilio y público, y el rescate constitucionalista, tanto en noviembre como en abril.
Pipe Faxas está presente en los que buscan que el pueblo dominicano se libere de la mugre que degrada todo lo que cubre, véase de las cúpulas politiqueras que han ordeñado el país en las últimas cuatro décadas.
Más allá del clima electoral, la lucha actual la asumimos con la dignidad que Pipe simboliza. Pipe Faxas nos alienta y se hace presente con la pauta de la vergüenza.