En el preciso momento de recibir sus más catastróficas derrotas, los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Fuerza del Pueblo (FP) han descubierto la existencia de la abstención electoral, la cual ha sido definida por Enrique Arnaldo Alcubilla, en su reconocido Diccionario Electoral, como “la no participación en la votación de quienes tienen derecho a ello. Su decisión es la de no votar en un proceso electoral o refrendario. Es un no hacer que no tiene consecuencias jurídicas para el titular del derecho, con excepción en aquellos ordenamientos en que el sufragio se configura no como un simple deber cívico o moral sino como un deber jurídico, y por tanto resulta exigible”.

La frustración se apoderó temprano de los dirigentes del PLD y la FP, quienes con los resultados ampliamente ventajosos a favor del PRM vieron cerrarse la esperanza de competir dignamente en las elecciones presidenciales y congresuales del 2024.

Después de meses de denuncias falsas y temerarias contra la Junta Central Electoral, el proceso electoral y el Partido Revolucionario Moderno (PRM), los referidos partidos han cambiado sus discursos por el de la abstención electoral.

Se trata de un intento inútil del PLD y la FP por cuestionar la legitimidad de las pasadas elecciones municipales y, de esa manera, justificar la vergonzosa derrota que sufrieron en las urnas.

Desde la separación de las elecciones presidenciales de las congresuales y municipales, a partir de la reforma constitucional del 1994, el comportamiento del electorado en lo relativo al abstencionismo electoral en las Elecciones Congresuales y Municipales fue el siguiente: 1998 un 47%, 2002 un 49%, 2006 un 42%, y 2010, que fueron las últimas elecciones separadas por dos años, un 43%, las del 2016 no aplican, debido a que las elecciones se celebraron todas el mismo día, mientras que en las del 2020, primeras exclusivamente municipales,  concurrieron a las urnas 3,679,081 votantes de un total de 7,847,040 electores, para una abstención de 50.86%.

De su lado, en las pasadas Elecciones Municipales el padrón fue de 8,105,151 electores, al cual se le deben restar aproximadamente un millón y medio, entre inscritos en listado del exterior y no inscritos, que residen en el exterior, por lo que no puedieron votar en las elecciones municipales, motivo por el que el padrón de las pasadas elecciones se reduce a 6,605,252, de los cuales concurrieron  a votar 3,775,587 votantes, que equivalen al 57.16 %, por lo que la abstención real fue de 42.84 %, muy por debaje de los países que, como nosotros, no tienen voto obligatorio.

Finalmente, como se ha podido apreciar, contrario a lo pregonado por los partidos de la Liberación Dominicana (PLD) y Fuerza del Pueblo (FP), las urnas continúan siendo bien valoradas por los electores dominicanos, los cuales premiaron en las pasadas elecciones municipales a la mayoría de los candidatos a alcaldes, regidores, directores y vocales del Partido Revolucionario Moderno, como lo volverá a hacer el 19 de mayo a favor del presidente, Luis Abinader, quien saldrá elegido para un segundo mandato, con una votación superior al 60 por ciento.