Es una fecha propicio para realizar balances y agendar nuevos propósitos. Se presta también para recordar y pausar, por los amigos que quedaron en el camino, por lo que no podrán ver la luz  del nuevo año.

Es propicio para dar gracias por la vida, por la familia núcleo esencial de la sociedad y  en ella; a los hijos continuidad del ser que se habrá de prolongar más allá de nuestra propia existencia vital.

Es un momento de dar gracias por nuestros amores en sus diferentes manifestaciones, sin amarguras, debido a que nuestra sola existencia es parte de una gratitud que no tenemos como recompensar en el tiempo.  Contribuir con  nuestras buenas obras, nuestros rectos valores y principios, pueden justificar la existencia humano; en este momento donde reanudamos esfuerzos  y auguramos con fuerzas renovadas, con esperanza, con anhelos la marcha hacia este año que recién empieza.

Es una labor suprema de cara  a la condición humana preservar su existencia, unir fuerzas y voluntades hacia lo colectivo.  Evitando que cualquier acción desproporcionada pueda producir generar pérdidas catastróficas de la existencia humana; sin descartar el riesgo de su desaparición.  Por lo tanto, hoy se hace cada una vez más necesario llamar al equilibrio, a la sensatez, a la prudencia, a la inteligencia, para evitar desenlace fruto de conflictos de intereses que esencialmente están explicado por visiones particulares.

Que este año sea un año de avance, sea un año de progreso, sea un año donde la humanidad pueda trabajar sosteniblemente por un planeta equilibrado, donde la humanidad pueda reducir significativamente la pobreza, donde la humanidad pueda controlar las migraciones y sobre todo las causas que lo generan.  Es un año propicio para avanzar, para avanzar en una conciencia colectiva de humanidad y de progreso.  Es un año también para preservar la democracia, las instituciones que la sostienen y los hombres que la inspiran, reiterarnos en las causas nobles del fundador de la república, Juan Pablo Duarte. Porque cada año también nace la patria y nuestra obligación de preservarla.