Analizando la actuación de cada actor en el escenario, iniciamos con la DGA que, como rectora de la cadena, le corresponde el liderazgo y en este sentido se han dado algunos pasos que podrían contribuir a la reducción de los tiempos del proceso, como es la presentación de la carga importada previo al arribo del barco lo cual es una muy buena medida en vista de que con esta se puede lograr un adelanto en el proceso de liquidación de la mercancía. De acuerdo con informaciones suministradas por empresas especializadas en estos procesos esta medida podría tener un mejor resultado en este proceso inicial, sin embargo aunque la DGA, permite que se haga la presentación hasta una semana antes de la llegada del buque, las navieras todavía no han podido realizar el manifiesto de las cargas, sino con apenas un día o máximo dos, antes de la llegada y en ocasiones esto se realiza después de la llegada del barco.
Al llegar la carga, la DGA también tiene una importante actuación en lo referente a los procesos de verificación, que de “manera aleatoria” se realizan a algunas cargas de importación y que obedecen a criterios que no hemos podido obtener y que lo cierto es que regularmente afectan a pequeños importadores y a medianas empresas industriales que importan materias primas. Este proceso suele tener tres modalidades, verificación visual, verificación total con personal y verificación total con montacargas.
La economía de tiempo que se podría tener con una presentación adelantada a la llegada del buque se ve en muchas ocasiones afectada por el proceso de verificación indicado, que se llevan cabo en la fase inicial. Si su mercancía debe ser sometida a una verificación solo por rayos x, no habría retraso, si además requiere de una verificación visual, entonces habría que solicitar un turno al administrador del puerto, el cual regularmente se toma entre 1 y 3 días, a veces mas tiempo. Aquí se rompe el proceso diáfano y ágil que se había iniciado con un adelanto en la presentación de la carga.
En cuanto a la verificación visual después de una verificación por rayos x, parecería que es una duplicación, ya que suele ser indiscriminada y entendemos que esta podría realizarse en el caso de que hubiera dudas después de la verificación con los rayos x, lo cual no sucede en la práctica.
Debe señalarse que el proceso de verificación puede obviarse en el caso de que el importador o exportador esté certificado como OEA(Operador Económico Autorizado), que tiene un valor internacional y para lo cual la DGA mantiene una ventana virtual abierta para acceder a los requerimientos que son necesarios para obtener esta certificación. Lo cierto es que, analizando los requisitos, parece que estas certificaciones están diseñadas para grandes importadores con grandes estructuras, mas que para el mediano y pequeño importador que regularmente es el mas frecuente. Existe una certificación denominada OEA SIMPLIFICADO, que tiene validez solo en el país y que precisa de menos requerimientos, pero, aun así, son bastantes.
Seguimos con los centros logísticos y las empresas operadoras logísticas que, autorizadas por la DGA, se especializan en establecer y llevar a cabo la logística correspondiente para que el proceso se realice en el tiempo optimo. A partir del decreto que creó estas empresas, se han instalado decenas en el país y lo cierto es que, aunque mundialmente han tenido un gran desarrollo, en nuestro caso, estos son mayormente utilizados por grandes empresas con grandes flujos y constantes de cargas de importación y exportación.
Las actuaciones de estas empresas, por lo menos para las medianas y pequeñas empresas del país habría que analizarlas y ponerlas en una balanza, para determinar si aplican y realmente tienen una justificación económica en contraposición con los costos asociados a estos servicios. En diferentes países de la región, en contraposición con la utilización de estos servicios, se ha optado por eliminar intermediarios y consecuentemente con un mayor involucramiento de los importadores y exportadores que están comprendidos dentro de las PYMES.