Miren amigos, los últimos pasos dados por el Kremlin suponen una escalada en la guerra de Ucrania. El presidente ruso Vladimir Putin anunció una movilización parcial de 300 mil rusos en edad de combatir. La medida que entró en vigor el pasado miércoles obedece a una necesidad, según expresó, de defender la soberanía e integridad territorial de aquel país. Y explicó que solo serían llamados reservistas que hayan cumplido el servicio militar obligatorio.
Putin decretó esta medida un día después de que autoridades prorrusas de varios territorios ocupados en la región del Donbass en el este de Ucrania anunciaran pseudo referéndums de anexión a Rusia considerados ilegítimos por Ucrania y Occidente que se celebrarían entre el pasado viernes 23 y el próximo martes 27 de este mes de septiembre.
Todos se preguntan ahora mismo sobre lo que implica este anuncio de Putin. Por el número de personas que han sido llamadas a esta movilización, unas trescientos mil, indica que es algo muy grave y que podría mostrar cierta desesperación. El asunto es que la guerra de Putin, o la operación militar especial, empezó con doscientos mil soldados y ahora está llamando a trescientos mil reservistas. Uno no está en la mente de Vladimir Putin, pero a simple vista es algo bastante grave y a la vez también te dice que Rusia está preparada para una larga guerra.
Se podría interpretar que el querría enviar un mensaje a la Comunidad Internacional de que va en serio si sus demandas no son atendidas. Es decir, que todos los territorios que han ido conquistando y están bajo administración rusa, deberán quedar bajo administración rusa y que dependa de los resultados de los referéndums que se están celebrando que queden, no solo ya bajo administración rusa, sino que sean considerados territorios rusos.
Es muy probable que Putin quiera evitar, al precio que sea, la experiencia de la Unión Soviética en Afganistán. En la mente de Vladimir Putin la caída de la Unión Soviética es un odioso, temido e imborrable recuerdo. Pues, uno de los factores que contribuyó a la caída de la Unión Soviética fue precisamente, esa terrible y desgastante guerra contra Afganistán, un país más pequeño, menos poderoso ayudado por Estados Unidos. Entonces existe una serie de paralelismos con Afganistán y Ucrania y es muy probable que Putin quiera evitar a como dé lugar que Ucrania se convierta en una nueva Afganistán.
El hecho de que vuelva a repetir algo que todos tenemos presentes que si una potencia nuclear es atacada en su territorio obviamente tiene derecho a utilizar sus armas nucleares. Significa que lo ha puesto en primer plano precisamente para recordar que si es atacado el territorio ruso entonces Rusia entrará en una guerra nuclear en el sentido de que responderá con armas nucleares, un escenario que nadie quiere.
Podríamos debatir si esos referéndums que se están celebrando estos días son ilegítimos, son legales o lo que usted quiera, pero el asunto es que si el resultado es positivo y la duma decide (esto es el parlamento ruso) aceptar los resultados favorables de los referéndums y la integración de esos territorios como parte del territorio ruso, da igual para los rusos que Estados Unidos o la Unión Europea digan que esos referéndums son ilegítimos y no valen porque los rusos van a actuar como si de territorio ruso se tratara.
Desde al año 2014 Crimea es considerado por Rusia como territorio ruso y por la Unión Europea como parte de la integridad territorial de Ucrania. Y esto es muy importante porque si Rusia lo considera como territorio suyo pues es claro que lo defenderá como si fuera San Petersburgo en el Golfo de Finlandia o Kaliningrado allá en el Báltico entre Lituania y Polonia.
En otras palabras, lo que Putin le está diciendo a occidente es lo siguiente: miren, esto va en serio. Empezamos la guerra con doscientos mil hombres y ahora le sumaremos trescientos mil. Si se sigue bombardeando Zaporiyia, Donetsk o Luhansk con armamento de la OTAN y utilizando soldados mercenarios, va a cambiar la naturaleza del conflicto pues ya no será Rusia contra Ucrania, sino que va a ser Rusia contra esos otros países. Entonces, no se trata solo de movilizar a trescientos mil reservistas, sino de la introducción de algo mucho más grande y fuerte.
Porque ¿para qué llamar a los reservistas si el ejército ruso tiene más de un millón de soldados?. Porque no todos los soldados rusos están en el frente ucraniano sino una pequeña parte y además los distintos informes que hemos ido conociendo hasta este momento hablan de que esos soldados no son muy expertos, que no son muy profesionales o que era gente prácticamente acabada de reclutar. La cuestión es que, si se llama a trescientos mil reservistas a estar dispuestos para ir allí, no se está hablando solo de que vamos a refrescar las tropas sino que se estaría intentando enviar el mensaje por parte de Rusia de que vienen muy en serio y que no se crean que la guerra va a acabar como han estado diciendo algunos líderes europeos de que esta guerra Rusia no la puede ganar. Están muy equivocados. Ese es el mensaje que quiere enviar Vladimir Putin y es muy claro y va a poner todo el efectivo en la pata de ese caballo. No es que va a ver cuánto dura esta guerra o cuánto los rusos resisten o a ver si llegan al invierno y los europeos entienden que le va a costar algo a ellos también. Pues no. Se trata de un mensaje contundente y sin ambigüedad de que Rusia no va a perder esa parte de Ucrania.