El respetado arzobispo metropolitano de Santiago, monseñor Freddy Bretón, al pronunciar la homilía de la eucaristía con motivo de la celebración de Corpus Christi, en el estadio Cibao, dijo los siguiente:
“La sociedad dominicana está bastante 'descalabrada' como consecuencia de la cantidad de hechos violentos, tales como los feminicidios, la ola de robos, asaltos y muertes que preocupan al pueblo”.
O sea, somos el segundo Haití de Latinoamérica. Nos estamos haciendo expertos en harakiri porque no se consulta lo que sucede en el resto del mundo. Hay gente que se vanagloria al resaltar los casos de homicidio, robos, etc. como si fuéramos el infierno de Dante.
A todos los dominicanos y los que pregonan que estamos dominados por la violencia, les recomiendo que vean este grafico:
Países con más homicidios por cada 100 mil habitantes (2021)
O sea, entre 24 países de Latinoamérica y el Caribe estamos entre los 6 con menos homicidios por cada 100 mil habitantes.
Después nos quejamos de que Estados Unidos advierta a sus ciudadanos que no visiten la República Dominicana por razones de seguridad ya que nosotros mismos somos los culpables de esas advertencias.
¿Y me pregunto? Que seguridad del carajo cuando precisamente es en Estados Unidos donde la gente no se siente segura en un Mall, en un restaurante, en las escuelas o en cualquier lugar público, donde semanalmente un desquiciado mental ametralla a decenas de personas si una razón especifica.
No somos ningún paraíso y el obispo Bretón tiene motivos para preocuparse por la delincuencia, pero somos un país bastante seguro comparado con el 80 % del resto de los países del mundo. Busquen cifras, consulten estadísticas para que no sigamos jediéndonos nosotros mismos. Y si alguien cree que eso perjudica al gobierno, se equivoca totalmente. Nos perjudica a todos.
Las homilías deberían hablar más del robo y el saqueo de políticos de la oposición que impusieron esa cultura en los pasados 16 años. Esa es la raíz de nuestros males.
Y que nadie venga a criticarnos porque la Policía Nacional actúa con mano dura contra la delincuencia ya que es la única vía para erradicarla. Mano dura sin importar las críticas, vengan de donde vengan.
Aquí yo he sido víctima de robo en mi hogar, pero también lo fui en Chile (asaltado frente al Hotel Sheraton) en Francia (donde me robaron un abrigo del carro), en Madrid (se metieron en mi habitación de un hotel 5 de estrella), México (donde le robaron la cartera a mi esposa). He viajado a mas de 80 países en los 5 continentes, mayormente por razones de trabajo y en ninguno me siento seguro. Salgo a la calle con 100 dólares, la cedula y una tarjeta de crédito, el resto lo dejo en la caja fuerte del hotel.
Finalmente, las iglesias deben señalar que proporción de esa delincuencia viene de la inmigración masiva de haitianos donde se cuelan miembros de las bandas asesinas que asolan el vecino país. Pero prefieren hablar de solidaridad, flexibilidad y derechos humanos para que sigan entrando refugiados de Haití hasta que el Infierno de Dante sea una realidad y que los delincuentes hagan de la suya.