I.- Mi valoración sobre Haití

1.- Me siento ser un hombre libre por entero. No tengo limitación alguna para ejercer mi derecho a pensar y expresar las opiniones que me he formado sobre un hecho o fenómeno social.

2.- Por formación ideológica, no tengo trato desigual hacia persona alguna por su origen social, preferencia sexual, etnia o ideas religiosas. Quiero al ser humano por su condición, tal como es, sin ninguna clase de discriminación.

3.- Por su actitud ante la vida, aporte al desarrollo humano, económico y social, determino y aprecio a la persona, no por el color de su piel, ni por el olor que emana de su cuerpo.

4.- Porque creo tener bien amueblada mi cabeza, no me dejo exacerbar, perder los estribos, ni ponerme hecho una furia, ante la campaña montada contra Haití, a nivel nacional e internacional con los argumentos  más diversos.

5.- Respeto el juicio que cada quien se ha formado de los nacionales haitianos que abandonan su lar nativo para venir al nuestro a vender su fuerza de trabajo en condición de inmigrantes.

6.- Contrario al criterio que tiene una gran mayoría de mis compatriotas, con relación al pueblo haitiano, de esta comunidad humana tengo un elevado concepto. Considero muy valiosos a sus hombres y mujeres.

7.- Ante la crisis permanente que vive el pueblo haitiano, no me presto a motivar irritación en la conciencia de mis connacionales, porque creo que, entre pueblos hermanos, hay que apaciguar, aplacar,  no hacer montar en cólera, nada de endemoniar

8.- Con respecto al proyecto de intervención en Haití, reitero que rechazo la injerencia de uno o varios Estados en los asuntos internos de otro, realizada por la fuerza en forma abierta o simulada. Hay que respetar la soberanía y la independencia de los pueblos, grandes y pequeños, blancos, negros y mulatos.

II.- opinión de Bosch, sobre Haití

9.- El parecer que tengo con relación a lo que ha sido y es el pueblo de Haití, también lo expresó en su oportunidad el profesor Juan Bosch, en el prólogo de la obra “Haití Radiografía de una Dictadura”,  de la autoría de Gerard Pierre Charles. [i]

10.-  Al leer la apreciación que hace el profesor Juan Bosch, en torno a Haití, como pueblo con una historia que dice claramente que es un  país que merece ser respetado y no desconsiderado, como se ha querido hacer en los últimos años utilizando los más hirientes calificativos.

11.- En su exposición, el profesor Bosch, comienza diciendo: “El pueblo de Haití tiene en su haber una revolución fenomenal, la más compleja que se ha hecho en la Edad Moderna; la única que fue a un mismo tiempo una guerra social, de esclavos contra amos; una guerra racial, de negros contra blancos y mulatos; una guerra civil, de negros y mulatos del norte y del oeste contra mulatos y negros del sur; una guerra internacional, contra españoles e ingleses, y una guerra de independencia, de Colonia contra metrópoli. Esa guerra de tantos aspectos no hubiera podido hacerse sin la dirección de grandes líderes y el respaldo decidido de las masas; y Haití dio ambas cosas”. [ii]

12.- Sigue escribiendo el profesor Bosch: “Las masas siguen a sus líderes cuando estos tienen una actitud consecuente con las necesidades y los deseos de aquellas, de manera que lo que debe llamar nuestra atención en la historia de la revolución haitiana 1791- 1803,  son los líderes”.  [iii]

13.- El profesor Juan Bosch, ampliando su opinión sobre Haití, dice: “¿Cómo es posible que Haití produjera en el siglo XVIII líderes tan extraordinarios como Toussaint Louverture, uno de los tres genios políticos que ha dado América; como Dessalines, Christophe, Petion? Excepto el último, los demás eran negros puros, esclavos o libertos, y de esos esclavos o nacidos esclavos solo uno sabía leer y escribir cuando comenzó la revolución; y esto quiere decir que las condiciones naturales de esos hombres se sobrepusieron a su estado de ignorancia; superaron el nivel de sus conocimientos, de manera que tienen una categoría singular en la historia americana. Cualquier analfabeto puede ser un héroe si tiene coraje, pero no es fácil que un analfabeto resulte ser un héroe y a la vez un gran líder de masas y, como en el caso de Louverture, un político excepcional”. [iv]

14.- Y continua escribiendo el profesor: “La raíz de ese fenómeno está en las condiciones del pueblo, pues las grandes figuras históricas representan lo mejor, y a veces lo peor de sus pueblos; han recogido de ellos todas sus esencias. El pueblo que dio un Toussaint Louverture es un pueblo extraordinario”. [v]

Ideas finales

15.- De lo escrito por Bosch, resulta que del pueblo de Haití, tenía  una gran consideración, comenzando por la heroicidad de sus grandes libertadores  que fueron ilustres luchadores populares.

16.- Partiendo de lo que han sido las grandes batallas libradas por  los haitianos para alcanzar su plena libertad, es de esperar que ese pueblo, más temprano que tarde pronto transitará para siempre por el camino de la libertad, con el esfuerzo y decisión de sus mejores hombres y mujeres.

17.- El pueblo dominicano, al igual que otros que han dado sobradas muestras de estar con las mejores causas, está en el deber de identificarse con el pueblo de Haití.

18.- El momento que vive Haití en la actualidad, marcado por una áspera lucha social, es para recibir la comprensión y el concurso solidario, la cooperación internacional, no la agresión.

19.- Lo mejor del pueblo dominicano debe expresar hospitalidad para con los haitianos, que con su laboriosidad en provecho de nuestra patria se hacen merecedores de sincera acogida, caluroso abrigo y total protección.

20.-  Desde lo más profundo del corazón de cada dominicano y dominicana, es oportuno salga fraternidad, solidaridad y abierto afecto hacia el pueblo de Haití, que muy bien se lo merece.

 

[i] Haití Radiografía de una Dictadura, páginas 9 hasta la 13, primera edición.

[ii] Haití Radiografía de una Dictadura, páginas 9 hasta la 13, primera edición.

[iii] Ídem

[iv] Ídem

[v] Ídem