Va en crecimiento galopante la conciencia mundial acerca de los danos que provienen del uso de los plásticos. Provoca consternación cada vez que en el estomago de una ballena muerta se descubren tales materiales. De manera instintiva se extrapola que el daño a los peces y a la vida marina amenaza la salud de los ecosistemas marinos y costeros y de los seres humanos. Por eso es necesario que nuestra industria turística abrace la cruzada contra los desechos plásticos. El esfuerzo debe ser parte de su estrategia de sostenibilidad y, por ende, su competitividad.

El nombre de este material proviene del griego “plastikos” y significa que se puede moldear. Fue el químico belga-americano Leo Baekeland quien en el 1907 inventó la baquelita. Esta fue “la primera sustancia plástica sintética que se podía moldear con calor, y una vez fría, se convertía en un material termoestable, resistente y aislante”. “En los años 60, este material comenzó a utilizarse en sustitución de otros más caros, como la madera o el vidrio para los embalajes. Una década después, en los 70, los plásticos también comenzaron a sustituir algunos metales de aleaciones ligeras. Ya en los años 80, su producción se intensificó, convirtiéndose en una de las industrias más relevantes a nivel mundial".

Entre los siete tipos de plásticos existentes el polietileno es hoy día el de mayor uso. Los usos mas frecuentes son el “envasado de alimentos, piezas de automóviles, construcción, muebles de jardín, césped artificial, carcasas de maletas, aparatos médicos, bolsas plásticas, etc.". Se reporta que los tres países que son responsables de tres cuartas partes de los residuos plásticos son Japón, China y Corea del Sur. En cuanto a la contaminación general, el portal Selectra.com reporta que los tres países que mas contaminan en el mundo son China, Estados Unidos y la India. Según la ONU el 1 % más rico de la población mundial emite mas gases de efecto invernadero que el 50 % más pobre.

Según la ONG The Nature Conservancy los impactos negativos de los plásticos son variados. Por ejemplo, la incineración de plásticos contribuye al cambio climático. Asimismo, “los residuos plásticos ahogan la vías fluviales, contaminan los océanos, matan la vida silvestre y se infiltran en la cadena alimentaria”. “Si la tenencia actual continua en 2050 habrá unos 12, 000 millones de toneladas de residuos plásticos en nuestros vertederos o contaminando el medio ambiente, el equivalente a casi 80 millones de ballenas azules”. El plástico de un solo uso es el problema mayor. Según el Instituto de Medio Ambiente de Tailandia, los residuos de plástico han pasado de 1.500 toneladas a la asombrosa cifra de 6.300 toneladas diarias, debido al aumento de las entregas de comida a domicilio.

Los plásticos son usados ampliamente por la industria turística por su versatilidad, durabilidad y bajo costo. “Botellas de agua, artículos de tocador desechables, bolsas de plástico, envases de alimentos y vasos se encuentran entre los mayores contaminadores de plástico asociados al turismo, según revela un informe del PNUMA”. El reto de la industria turística es la reducción y/o reutilización de los plásticos en sus operaciones para disminuir sus deletéreos efectos en los desechos sólidos. Esto es lo mismo que decir que el problema son los plásticos de un solo uso.

Un reciente reporte dice: “Para los turistas, la realidad es que experimentamos más sol, menos mar y más plástico. A menos que podamos hacer que el mar esté más limpio, ir a la playa, bucear o disfrutar de la fauna costera pronto se convertirá en una cosa del pasado. Los científicos predicen que el 90 % de los arrecifes de coral morirán en 2050 si no tomamos medidas drásticas para detenerlo. – Cada año mueren un millón de aves marinas y 100.000 animales marinos. La supervivencia de casi todas las especies está en peligro. Las playas de Indonesia, Filipinas, Tailandia y Grecia están actualmente envueltas en desechos plásticos”.

“El Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) han publicado un nuevo e importante informe que aborda la compleja cuestión de los productos plásticos de un solo uso en los viajes y el turismo. El informe «Rethinking Single-Use Plastic Products in Travel & Tourism» se presenta en el momento en que los países de todo el mundo comienzan a reabrir sus puertas y el sector de los viajes y el turismo empieza a mostrar signos de recuperación tras la pandemia de COVID-19, que ha sido devastadora. El informe es un primer paso para mapear los productos plásticos de un solo uso en la cadena de valor de viajes y turismo, identificando los puntos conflictivos de las fugas medioambientales y proporcionando recomendaciones prácticas y estratégicas para las empresas y los responsables políticos.

Su objetivo es ayudar a las partes interesadas a dar pasos colectivos hacia acciones y políticas coordinadas que impulsen un cambio hacia modelos de reducción y reutilización, en línea con los principios de circularidad, así como con las infraestructuras de residuos actuales y futuras. Las recomendaciones del informe incluyen redefinir los productos plásticos de un solo uso innecesarios en el contexto de la propia empresa; dar preferencia contractual a los proveedores de productos reutilizables; planificar de forma proactiva procedimientos que eviten la vuelta a los productos de plástico de un solo uso en caso de brotes de enfermedades; apoyar la investigación y la innovación en el diseño de productos y modelos de servicio que disminuyan el uso de artículos de plástico, y revisar las políticas y las normas de calidad teniendo en cuenta la reducción de residuos y la circularidad.”

Según el PNUMA, Según información del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, más de 4 millones de desechos de plástico fueron recogidos en áreas costeras entre los años 2006 y 2012 en el Caribe. De ahí que en el 2020 siete países de la región prohibieron el uso de los plásticos de un solo uso para proteger a su industria turística: Belice, Jamaica, Barbados, Dominica, Grenada, Trinidad y Tobago y Bahamas. Nuestro ministro de Turismo anuncio en la feria DATE que a partir de mayo de este ano los hoteles iniciaran una campana para eliminar el uso de plásticos en sus operaciones.

Combatir el impacto negativo de los plásticos es ya una cuestión de supervivencia para la industria turística. Esto así porque un reciente informe de Booking sobre la sostenibilidad (Sustainable Travel Report, 2023), con entrevistas a 33,000 viajeros en 35 países, “indica que con entrevistas a 33.000 viajeros en 35 países, entre ellos España, indica que un 76 % prefiere opciones sostenibles. Este porcentaje supone un incremento de 16 % respecto a los datos de 2021 y del 5 % sobre los de 2022. Es más, un 43% dice estar dispuesto a pagar más por viajar de forma más sostenible. Un segundo estudio, presentado por Mastercard en Madrid esta semana y centrado en viajeros de Alemania, Reino Unido y Francia, apunta conclusiones similares y revela algunas contradicciones: el 53 % de los encuestados se considera bastante implicado en la sostenibilidad, pero solo un 16% se comporta de forma sostenible cuando viaja.”

Obviamente, la el MITUR tendrá que crear un departamento ambiental para darle seguimiento a la introducción de nuevas practicas en materia de sostenibilidad. La restricción del uso de los plásticos debe figurar en primer orden de prioridad. A nuestro favor tenemos el hecho de que un 70 % del inventario de habitaciones hoteleras de nuestro sector turístico es de propiedad español y ya en España la industria turística esta respondiendo a estas nuevas exigencias de la sostenibilidad, que es lo mismo que decir competitividad.