La rápida intervención para la extracción de los dos mineros atrapados, desde hacía diez días, en la Mina del Cerro de Maimón, provincia Monseñor Nouel, nos mostró que el nivel técnico del país en materia de emergencia minera es avanzado.

 

La Presidencia de la República, la Corporación Minera Dominicana (CORMIDOM), el Ministerio de Energía y Minas, la Dirección General de Minería y un equipo de geólogos, geotécnicos, operadores de máquinas e ingenieros lo dieron todo para salvar las vidas de Carlos y Gregory.

 

La práctica minera, en cualquier parte del planeta, representa un riesgo para quienes ejercen esa difícil tarea. Y las medidas de seguridad que deben implementarse empiezan con un análisis exhaustivo de los peligros existentes fuera y dentro del entorno donde se opere.

 

Nos hizo sentir tranquilos el ver a profesionales dominicanos, australianos, estadounidenses, mexicanos, colombianos, peruanos, y de otros países, trabajar juntos en esta emergencia minera que hizo posible el rescate de los dos mineros.

 

El colombiano Carlos Yépez Ospina y el dominicano Gregory Alexander Méndez llevaban 10 días atrapados en el “fondo de la tierra”.  El equipo de técnicos y profesionales que describimos antes se focalizó sin descanso en la ubicación y extracción de los dos obreros, para devolverlos salvos y sanos a sus familiares y a la sociedad.

 

La Corporación Minera Dominicana, el Ministerio de Energía y Minas encabezaron una operación merecedora de reconocimiento, y unidos a ellos, otras entidades y dependencias, tales como: la Dirección de Mina, Servicio Geológico Nacional, Salud Pública, Defensa Civil, Cuerpo de Bomberos, Brigada de Mitigación de Desastres del Ejército y su Unidad Humanitaria y de Rescate (UHR),  Comisión Militar y Policial (COMIPOL), Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 911Centro de Operaciones de Emergencias, entre otras.

 

Cuando se hizo pública la noticia de los mineros atrapados en Maimón, la Defensa Civil fue informada de la situación y en seguida se puso al servicio del personal líder de las operaciones en la minera. Y por tratarse de una emergencia especializada, la Defensa Civil Provincial orientado por la sede a participar, ofreciendo poyo y acompañamiento a los responsables de la empresa en la respuesta.

 

La Defensa Civil sabe que la prospección minera, en el ciclo de la minería, contempla el estudio de los riesgos probables, y quienes desarrollan esa actividad, tienen elaborados sus planes y protocolos de reducción de los riesgos identificados. Por esa razón, nuestra presencia fue de apoyo a la minera por si requiriese de algún servicio.

 

La CORMIDOM emplea el tipo de minería subterránea en esa zona, la cual consiste en extracción de materiales mediante excavaciones debajo de la tierra. Esa actividad implica una serie de riesgo que previo a las operaciones deben ser evaluadas para definir planes y protocolos de seguridad.

 

Existen los planes de gestión de riesgo, de seguridad, contingencia, emergencias y protocolos de actuación minera. Estas herramientas y sus contenidos pueden solaparse técnicamente, pero no afectan el proceso, por el contrario, fortalece el esquema de emergencia.

 

El país ha avanzado mucho en esa materia, especialmente desde el origen industrial moderno de la minería hace casi dos siglos (1848-2022).

 

Subrayamos que una minería responsable siempre cumple con los estándares internacionales de seguridad de manera rigurosa, y eso fue lo que vimos durante el proceso de los dos mineros atrapados.  Se ejecutaron protocolos que permitieron un rescate “limpio”.

 

Para tener una idea de los planes y protocolos que pueden ser implementados en este sector a continuación expongo los que el ciclo de la minería observa dentro de las actividades interdisciplinarias:

 

  • Identificación de peligros y estimación del riesgo como primera parte que se realiza para analizar la vulnerabilidad en el lugar donde se determine la existencia de yacimientos con posibilidades de explotación;

 

  • Iniciación de preparativos para la elaboración del plan de atención y prevención de accidentes mineros, una vez comenzada las operaciones, con el fin de asegurar una minería responsable, ambiental, social y productiva;

 

  • Plan de operaciones de emergencias minera, para configura y considerar la aplicación de fases de alarma, respuesta y etapa de comunicación;

 

  • Protocolos de actuación de minería, los cuales instruyen sobre los pasos a seguir cuando concurren determinadas circunstancias, y el modo de proceder de los obreros, técnicos y profesionales clave de la empresa minera.

 

Y finalmente, pueden elaborarse otros perfiles de riesgo y acciones, pero en esencia los básicos indicados acá son de gran utilidad; si se cuenta con ellos, puede dar por seguro que cualquier accidente como el de los mineros de Maimón estará bajo control si se administra con un buen equipo.