A propósito de que el día de ayer, miércoles 2 de agosto de 2023, S.E. Chen Luning, embajador de la República Popular China en la República Dominicana, recibió, gracias a la coordinación del destacado golfista Andrés Dilonex, la visita, en su residencia, de la Selección Nacional de Voleibol, entiéndase, las ya conocidas “Reinas del Caribe”, creo oportuno referirme, precisamente a un proceso de transformación, del equipo de voleibol femenino dominicano.
Erase una vez un equipo de voleibol femenino, de un pequeño país, ubicado en el mismo trayecto del sol, que no lograba avanzar en los ranking regionales y mucho menos mundiales, con una deficiente participación en los torneos internacionales, porque aunque tenia una pléyade de jóvenes jugadoras, con un talento extraordinario, carecían de recursos económicos, de una política estatal clara, pero sobre todo, faltaba que se les prestara atención para poder enfocarse.
Pero de repente, una persona conocedora del mundo del deporte, que era a la sazón, Secretario de Deportes (hoy Ministerio), decidió apoyar a este equipo nacional de voleibol femenino y así se inicia la historia. Me refiero a Cristóbal Marte.
Fue en los años 90, de la mano de Ricardo -Gioriber- Arias, que Cristóbal Marte, comienza a acercarse al voleibol femenino de la República Dominicana. Después de observar las deficiencias plantea crear un “programa especial”, a corto, mediano y largo plazos, con la visión de colocar al voleibol femenino de la República Dominicana en la cumbre, en la plataforma de los egregios.
Con una atención especial e inversión, que comenzó por contratar al técnico cubano Jorge Pérez Vento, entre otros, (desde 2008 el entrenador es Marcos Kwiek de Brasil), el equipo de voleibol dominicano fue avanzando, alcanzando logros importantes.
En 2002 ganan oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de El Salvador, lo que ha repetido en todas las demás versiones, ganando el sexto consecutivo ante Puerto Rico el pasado sábado 8 de julio, precisamente en El Salvador, consolidándose como las indiscutibles “Reinas del Caribe”.
Oro en los Juegos Panamericanos de 2003, 2019 y bronce en 2015. En la Copa Panamericana han ganado 6 medallas de oro, 10 de plata y 3 de bronce, desde el 2002. En el continental NORCECA, 6 oro, incluyendo las últimas 4 versiones, 3 de plata y 5 bronce, desde 1997.
Como se observa, han ganado a nivel regional y global, hasta posicionarse en el top 10 del planeta en voleibol femenino. En estos momentos están en noveno lugar, sólo EEUU y Brasil en América están por encima y obviamente es el único equipo de El Caribe en esa lista. Además tiene en la talentosa y extraordinaria Brenda Castillo a la mejor jugadora del planeta en la posición de libero, defensora y receptora.
A esa transformación la he denominado el “Efecto Cristóbal Marte”, porque, gracias a su visión, y a su apoyo directo, que se inició formalmente en 1994, demostró que cualquier sector, ya sea, como fue el caso un equipo deportivo, como un tema de desarrollo nacional, la educación, la salud, seguridad ciudadana, etc, si se le presta atención de manera especial, si alguien asume el tema y le da el debido seguimiento, no hay otros resultado que el éxito.
Los políticos dominicano, los que diseñan políticas públicas y hasta en el sector privado, el que desee avanzar y tener éxito en un proyecto debería tomar como modelo, el “Efecto Cristóbal Marte”. Adelante.