Somos un destino turístico de clase mundial, logrando el pasado año 8.6 millones de turistas con un inventario que sobrepasa las 85,000 habitaciones, pero la mayor parte del territorio nacional carece de una señalización adecuada. Para facilitar la movilización de los turistas nacionales y extranjeros y proveer un ambiente más seguro y confiable se requiere ampliar, mejorar y estandarizar la señalización. El proyecto requerido debera privilegiar los lineamientos que se apliquen especialmente a los turistas. Y ONU Turismo puede ayudarnos en eso..

Consultada para evaluar la situación de la señalización a nivel nacional, la inteligencia artificial (ChatGPT-4) devolvió los siguientes resultados. “El director de Señalización del Ministerio de Obras Públicas, Efraín Marte, ha calificado la situación de la señalización en carreteras y avenidas del país como "grave", señalando que es una de las principales causas de accidentes de tránsito. A principios de 2024, la Organización Panamericana de la Salud ubicó al país en el primer lugar mundial en tasa de fallecimientos por accidentes de tránsito.

Para abordar esta problemática, el Ministerio de Obras Públicas ha destinado aproximadamente 2,700 millones de pesos para mejorar la señalización vial en todo el territorio nacional. Este esfuerzo ha incrementado el número de empresas contratistas de tres a 16 y los contratos de señalización de siete a 32. Sin embargo, Marte enfatiza que, además de las mejoras en infraestructura, es crucial que los ciudadanos respeten las señales de tránsito y los dispositivos de seguridad.”

En Santo Domingo y en otras grandes ciudades y pueblos, la situación es notoria. La ausencia de señalización horizontal adecuada, el deterioro del pavimento y la desorganización en las paradas de autobuses causan el caos vehicular y aumentan el riesgo de accidentes. Agravan la problemática la falta de semáforos en intersecciones con alto flujo vehicular y la inacción de las autoridades para controlar el abordaje de pasajeros. Y ni hablar de la señalización de calles y avenidas: cuando no esta totalmente ausente los letreros están dañados y pocas veces se puede leer bien el nombre de la vía.

En las zonas turísticas, la deficiencia en la señalización es particularmente preocupante. Por ejemplo, en Punta Cana, se ha observado que la falta de señales claras en áreas como la rotonda de Punta Cana desorienta a los conductores, especialmente a aquellos que desconocen la zona, llevándolos a destinos no deseados como el aeropuerto cuando su intención era dirigirse a Bávaro o Verón. Pero peor aun es el estado de la señalización para quien maneje desde Santo Domingo hacia Bávaro-Punta Cana.  El desorden y el deterioro de la poca señalización existente con frecuencia termina en la perdida de dirección para quien no este familiarizado con el trayecto.

Según ONU Turismo, por señalización turística se entiende “el conjunto de señales diseñadas para orientar, informar y guiar a los visitantes dentro de un destino, mejorando su experiencia de viaje y facilitando el acceso a atractivos, servicios y recursos turísticos.” El objetivo principal de la señalización turística es mejorar la accesibilidad, sostenibilidad y disfrute del turismo, garantizando una experiencia más segura y enriquecedora para los visitantes. Entre los beneficios de la señalización se cuentan 1) mejor orientación y facilidad de movilidad del visitante, mayor seguridad al revelar áreas de riesgo, promoción de destinos menos visitados y aumento del tiempo de estadía y del gasto turístico.

“Esta señalización debe ser clara, visible y universalmente comprensible, utilizando símbolos, pictogramas y textos que permitan a los turistas desplazarse con facilidad, independientemente de su idioma o conocimiento previo del lugar.” Según ONU Turismo puede ser de varios tipos: “1) la informativa, para brindar datos sobre sitios de interés, horarios, historia y características, 2) direccional, que indica rutas, accesos y distancias hacia puntos turísticos, 3) de seguridad, que advierte sobre riesgos o normas a seguir en ciertos lugares, y 4) interpretativa, que explica el valor cultural, histórico o natural de un sitio.”

Es cierto que en un destino turístico de masas como la RD la señalización no juega un papel crucial en el desempeño de la industria. El grueso de los turistas tiende a estar confinado en los resorts y el mismo modelo de negocio del “todo incluido” milita en contra de su salida al territorio, por lo cual la movilidad del visitante no es segura. Pero el objetivo nacional de desarrollo es precisamente diversificar el producto turístico a fin de que los turistas produzcan una mayor derrama económica al desparramarse por las diferentes regiones y pueblos. Ahí es que la señalización juega su mayor papel.

Hasta ahora no parece existir una atención deliberada del MITUR para este gran reto de la señalización turística. Paises como Perú , Argentina y Ecuador hace tiempo que tienen sus respectivos manuales sobre el tema. Pero ONU Turismo, cuyas directrices sobre accesibilidad suponen una primera piedra, puede ser un socio idóneo para acometer el proyecto. Aparte de coordinar esfuerzos con el MOPCC, es con ese organismo de las Naciones Unidas con quien MITUR mejor podría iniciar un esfuerzo conjunto. La prioridad de la tarea se deriva, por supuesto, de la estrategia de competitividad que debe estar basada, principalmente, en el mejoramiento del producto turístico.