Josefa Altagracia Penson Nouel, cariñosamente Fifín, nació en Santo Domingo el 19 de marzo de 1910 y falleció a los 55 años en 1965. Hija única de Domingo Guillermo Penson Rodríguez (1881-1959) y María Teresa Bárbara Nouel Bobadilla (Aguadilla, Puerto Rico, 1869-Santo Domingo 1939) se casó en 1941 con Diómedes Aquino Ramírez, nacido el 12 de octubre de 1912 y fallecido a los 63 años en 1965.

Su madre es hija de Carlos Rafael Nouel Pierret y Clemencia Antonia Bobadilla Desmier D´olbreuse, es decir, sobrina de monseñor doctor arzobispo metropolitano de Santo Domingo y presidente provisional de la República Dominicana: Adolfo Alejandro Nouel Bobadilla (1832-1937), por lo tanto, nieta de Tomás Bobadilla y Briones (1785-1871). Su padre, a su vez, es hijo de Francisca Antonia Rodríguez Montaño y César Nicolás Penson, quien además de ser conocido por ser el autor de Cosas Añejas, colaboró con la fundación del Instituto de Señoritas Salomé Ureña, del que tambíen fue profesor. Una ascendencia, sin lugar a dudas, destacada en la historia de las letras, de la educación, del derecho y  de la política dominicana.

Con Diómedes Aquino Ramiréz procreó en 1951, diez años después de su boda, a su unica hija Justa María Aquino Penson, fallecida a sus 42 años, quien se casó en primeras nupcias con José Antonio Columna y en segundas, con Numa Pompilio Felipe Brower, dejando como descendencia a Ivan Columna Aquino y a Jenifer Denisse Brower Aquino.

A nivel de investigación genealógica la familia Nouel, debe ser una de las mejor documentadas del país, pues han podido remontar su linaje hacia el 1403, desde la Bretaña Francesa hasta el viaje transatlántico que los situa en Venezuela, Curazao, Aruba, Cabo Haitiano y República Dominicana. Implicando en dicha investigación a los descendientes que se encuentran en los citados territorios.

Josefa Penson Nouel y las clases de Zoología

Estas imágenes representan una muestra aleatoria de un conjunto mayor de dibujos de Zoología elaborados por las estudiantes de Segundo Curso A de la Escuela Normal de Señoritas, correspondientes a los años 1939-1940  y encuadernados por la profesora Josefa Penson Nouel, la querida Fifín, que contaba para ese entonces con 30 años de edad y que con la abgnegación que caracterizó el magisterio de la época, no se había casado, no tenía hijos y acababa de perder a su madre María Teresa Bárbara Nouel Bobadilla, que murió en 1939.

Este compedio de Zoología contiene 42 páginas, con arpoximadamente la misma cantidad de dibujos, todos firmados por las estudiantes cursantes. Se encuentra organizado por reinos, partiendo desde el de menor complejidad hasta el de mayor complejidad, es decir, desde el reino bacteria, hasta el reino animal. Los dibujos, sobre todo los que corresponden a los organismos más complejos muestran buenas destrezas, algunos se encuentran con colores añadidos, otros no.

Las estudiantes que apararecen firmando sus producciones escolares son: Marta Pérez, Estela Perreyra, Gladys Valdez, Celeste Siragusa, Lidia de la Cruz Cabrera, Gladys Amelia Schrils Vidal,  Rosa Nelly Abreu. Josefa Montero, Elena Cruz Dauzoir, Aurora López, Alba Gutierrez Pereyra, Isabel Oliva, Mercedes de los Santos Binet, Ligia María Puello, María Dolores Phipps, Inés Vizcaino Ariza, Thelma Pérez Suarez, Olga A. Rodrigo, Ramona Ramírez, Alba Cloris Vizcaino Ruíz, Andrea Esther Guerrero Ramírez, Georgina Moscat, Pura Guerra, Isabela Hernández Díaz, Angela Hernández Suarez, Mireya Polanco, Mercedes Sánchez Cabral, Martha Pérez, Rosa Margarita Mendoza Franduiz, Sofía Bass Jhonson, Josefa Montero, Celeste Siragusa, Gloria Mir, Fedora Lamothe, Milady Batle Molina, A López Contreras, Sofía Bass Penson, Lidia De la Cruz Cabrera, Mireya Polanco Moya, Isabel Báez, Gracita Senior Velazquez, Rhina Marina Monclús y Nereyda Andina Romero.

Este tipo de documento no se encuentra con frecuencia en las ventas de artículos coleccionables, sin embargo muestran el desarrollo, durante un año escolar, de las clases de zoología de una emblemática institución educativa como lo es el Instituto de Señoritas Salomé Ureña. Aquí se evidencia el trabajo mancomundo entre docente y estudiantes, la forma en que se enseñaba la zoología, que probablemente partía también de una observación en áreas abiertas y en laboratorios, los materiales utilizados, como lo son el tipo de hoja, el estilo de encuardenación, así como la estética de la compilación, la forma de escribir y sobre todo, nos muestran un conjunto de nombres de compañeras de escuelas, que  muy probablemente, pasaron muchos momentos agradables en sus encuentros diarios.