El pasado 30 de agosto de 2022 murió Mijaíl Sergeyevich Gorbachov, quien fuera el último líder oficial y jefe de estado de la Unión Socialista de Repúblicas Soviéticas (URSS). La URSS fue una unión transcontinental que agrupó a 15 repúblicas que tenían al comunismo como sistema político. Existió desde 1922 hasta 1991. La actual Federación Rusa encabezaba la Unión Soviética, la cual -a su vez- lideraba el bloque oriental de la Guerra Fría, enfrentamiento político-económico y militar que del otro lado tenía al bloque occidental liderado por Estados Unidos.
Gorbachov nació en 1931 y fungió como presidente de la Unión Soviética entre 1990 y 1991, año en el que fue disuelta. Gorbachov era marxista leninista, pero principios de la década de los años 90 (quizás -con discreción- a final de la década de los años 80) giró hacia la socialdemocracia. Alcanzó rápidamente el poder tras las muertes sucesivas de tres gerontócratas soviéticos (Leonid Brezhnev, Yuri Andropov y Konstantin Chernenko).
Sobre todo después de 1986 (año en el que ocurrió el accidente de la Planta Nuclear de Chernobyl) Gorbachov, un reformador, enfatizó la necesidad de reformar el sistema comunista soviético en dos sentidos, a saber, la perestroika y la glasnost. Con la perestroika (reconstrucción) Gorbachov pretendió descentralizar la toma de decisiones económicas con miras a promover su eficiencia. Como complemento, con la glasnost (apertura) Gorbachov procuraba mayores libertades de prensa y de expresión. De hecho, durante la preeminencia de Gorbachov disidentes políticos como Anrei Sakharov retornaron del exilio interno y se integraron a la vida urbana. También se instaló Eco de Moscú, la primera emisora liberal del país.
A pesar de haber sido el sepulturero del sistema soviético, probablemente no fue Gorbachov quien lo mató. No obstante, su esfuerzo no bastó para relanzar el sistema soviético, máxime cuando este conllevaba una especie de democratización de un sistema basado en autoritarismo. Al día de hoy, el gobierno del presidente Putin ha trabajado para revertir las reformas impulsadas por Gorbachov. También, a raíz de la invasión a Ucrania, ha ordenado el cierre de Eco de Moscú.