Una reflexión profunda sobre la crisis político- militar en Ucrania, nos permite sustentar la afirmación de la miopía del liderazgo occidental.   La invasión   de Ucrania es la continuidad de la guerra iniciada hace ocho años. Europa depende estratégicamente de Rusia en materia energética, cambiar esa matriz de suministro podría durar hasta veinte años. La debilidad política  de occidente se expresa en su fraccionamiento, Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos. La interpretación y alcance de los acuerdos Rusia-China, es una redefinición de alianzas políticas estratégicas a nivel global que cambia la política mundial

Estamos en la continuación de una guerra que se inició con la anexión de Rusia de la península de Crimea, y que se ha sostenido durante ocho años con fuerzas irregulares prorrusa en las llamadas Zonas de Ucrania Dumbá,  por lo tanto, el gobierno de Ucrania nunca ha tenido en control total del territorio.  Rusia monto  un enclave en territorio ucraniano. Militarmente desplegó más 130 mil soldados con armamentos  de todos los calibres, sobre diferentes puntos de la frontera ucraniana. Reconoció las provincias rebeldes llevando a la categoría de repúblicas, para iniciar despliegue militar sobre ese territorio hacia Ucrania, los arfiles en movimiento.

La dependencia energética de Europa respecto a Rusia fue advertida por   Estados Unidos en una reunión en 2018 en Alemania cuando sentenció: Ustedes han formalizado acuerdo con Rusia de Gas y Petróleos(Alemania) , llenando  con miles de dólares la economía rusa, esto llevaría a que Rusia contralara el 65% del suministro del gas de Alemania, ustedes son dependientes y están enriqueciendo a Rusia. La dependencia energética europea puede ser tabulada de la siguiente forma: Alemania en un 65%, Finlandia y Suecia en 100%, el resto un promedio de 25%. La dependencia energética  es alrededor de un 50% en estos momentos. Nadie puede sustituir a Rusia en corto plazo en el suministro de gas para Europa.

La debilidad política del bloque trasatlántico se expresa en la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, debilitando sustancialmente del bloque comunitario, esto ha permitido diferentes enfoques sobre la política internacional, dispersa  la comunidad de inteligencia. El fracaso de Estados Unidos en Afganistán y su   debilidad económica impide una acción militar sobre el terreno, limitándose   a una  cooperación militar tardía.

Una característica de ese debilidad fue la conducta de Francia, el presidente  actuando en solitario pretendió dar solución a una crisis, cuyo plan estratégico y decisión política ya estaba tomada,  sólo el Secretario de Defensa Anthony Blinken   estuvo a la altura de los acontecimientos, cuando habló de intervención inminente de Rusia a Ucrania, sólo bajo esta aseveración categórica, Europa entendió que la intervención de Rusia a Ucrania era prácticamente indetenible.

De manera previsible y con un movimiento audaz, Putin aseguró que las sanciones  del bloque de occidente no tendrán ningún impacto.  Debido a que ha concertado amplios acuerdos económicos con China, ampliando el suministro de gas a través de GAZPROM, proyectando un suministro de 38.000 millones de metros cúbicos, está  acción   previene lo que hasta ahora es el resultado de un débil régimen de sanción a Rusia. Existe una alianza China-Rusia, planteando abiertamente su  oposición al despliegue de la OTAN en Ucrania.

El Pacto Chino-Ruso, puede ser entendido por los analistas de las relaciones internacionales, como una redefinición profunda de la mismas en el Siglo XX1, con algunas de las siguientes características: China se sumó a la propuesta  de Rusia, para las nuevas formación de garantías sobre seguridad en Europea de manera vinculante, estos pretender redefinir a partir de su lógica las relaciones con Europa, no así si con los Estados Unidos.  Criticaron   la cumbre sobre Democracia, que Estados Unidos auspició diciendo que intenta imponer sus modelos al resto de los países, esta cumbre participó  110 países, declaración política. Hay una alianza sostenible a 30 años de cooperación energética.

La miopía del liderazgo occidental  se ha puesto de manifiesto de manera clara, esperamos que el conflicto que se desarrolla sobre el terreno pueda tener una solución con el menor costo de vidas humanas.  En el telón de fondo, y cómo percibir la  previsibilidad de los acontecimientos, no olvidemos el conflicto China- Taiwán. China aseguro el apoyo de Rusia para una decisión   futuro sobre este tema.

Estaba claro que esta partida occidente no la podía ganar, su único movimiento claro sin producir un Jaque Mate al Rey, era pactar un acuerdo de neutralidad permanente de Ucrania, su no ingreso a la OTAN. Solo la miopía del liderazgo  occidental  impidió ver el tablero mundial. Nunca  comprometa al Rey, mejor entable la partida.