Cada 27 de febrero celebramos nuestra independencia, y, además, conmemoramos el natalicio de una heroína, nuestra mariposa Patria Mirabal. Entre las ruinas de lo que fue su casa familiar ubicada en Conuco, Salcedo, la cual fue arrebatada de sus manos, saqueada y destruida por los calieses en aquella época, recordamos cada año su corta vida, todo lo que ella fue y lo que representa para sus hijos, nietos, familiares, amigos y amigas cercanos. 

La misión de la Fundación Hermanas Mirabal es mantener viva la memoria histórica de nuestras mariposas, Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, tres hermanas, hijas, madres, dominicanas, quienes se involucraron, en carne y espíritu, en la lucha contra la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo. En su séptimo año consecutivo, el “Té de Patria” es una actividad en honor a Patria que se celebra en el Jardín Memorial de Patria Mirabal, las ruinas de su antigua casa familiar, y en esta ocasión, como su nieta, pude orgullosamente compartir las siguientes palabras:

“Hoy estoy aquí, no solo en nombre de la Fundación Hermanas Mirabal, sino también en mi propio nombre, para rememorar la vida de nuestra querida Patria Mirabal. Y qué mejor lugar que hacerlo aquí, en este bello jardín, que ella cuidadosamente arreglaba con hermosas flores, como si fuese una artista con su pincel. 

Patria era una mujer de arte, detallista a la perfección, sencilla mas elegante. Vivía la vida con pasión, disfrutando cada segundo de ella. Era una mujer de fe y de fuertes convicciones, suave en su trato y de profundos valores. Coleccionaba pequeñas tazas y enseres de cerámica, pintaba a carbón y le gustaba bordar.

Formó una familia junto a Pedro González (Pedrito), dando nacimiento a sus hijos Nelson, Noris y Raúl, o como ella le decía, ‘el restecito de su querer’. Los que la conocieron relatan que fue una mujer que irradiaba dulzura con su sonrisa y que brillaba por sus excelentes atenciones para con sus visitantes, familiares y amigos. Quien recuerda esta casa decía que parecía una postal, pero como decía Tío Jimmy, no una postal inanimada, sino un ambiente de alegría y vida.

Se destacó por ser una hermana solidaria. Al ser la mayor de cuatro hermanas, aprendió a cuidarlas y ser apoyo de cada una de ellas. No se perdía ningún evento familiar, estaba siempre presente para brindar apoyo en lo que se necesitara. Además, se dedicó a ayudar a los más necesitados con lo que podía. Ella fue un ser humano de corazón puro y noble. En fin, como decía Mamá Dedé en su libro ‘Vivas en su jardín’: Patria era una mujer excepcional.

Patria estuvo involucrada activamente en las actividades clandestinas en contra de la dictadura junto a sus hermanas Minerva y María Teresa. Esta tierra de hermosos jardines no solo fue hogar, sino también fue un lugar histórico, donde se dio lugar a la primera reunión de delegados regionales de los diferentes movimientos clandestinos en contra de la dictadura, y que posteriormente constituirían el movimiento revolucionario 14 de junio. En dicha reunión, relata el Sr. Julio Escoto, miembro fundador, se elaboró la agenda para la consolidación del movimiento, proclamando la meta específica de luchar por marcar el comienzo del final de la dictadura de Trujillo.

Patria y Pedrito González, además, abrieron las puertas de su hogar para que sea utilizada como almacén de armas, poniendo en riesgo todos sus cimientos, su familia y sus hijos. Sin embargo, Patria firmemente reclamaba (en sus palabras): 

‘No podemos permitir que nuestros hijos crezcan en este régimen corrupto y tiránico, tenemos que luchar en su contra, y yo estoy dispuesta a darlo todo, aún mi vida si es necesario’.

Un 27 de febrero hace 98 años llegó a esta tierra nuestra Mariposa Patria Mirabal. Llegó para dejar una huella indeleble. 

Creo firmemente que su vida entera estaba marcada desde el día de su nacimiento. 

27 de febrero del 1924. 

Patria. 

No hubo un nombre más perfecto, y qué orgullo el mío de llevar su nombre.

En nombre de la familia Mirabal, queremos agradecerles a todos por haber asistido a este evento, y esperamos que se mantenga viva, en todos ustedes, esa invaluable llama de justicia y libertad por la que lucharon Patria, Minerva y María Teresa Mirabal”.