En las últimas semanas, varias organizaciones y personas involucradas con el sector cinematográfico han tomado tiempo para defender la Ley 108-10 (en lo adelante, "Ley de Cine") y sus incentivos partiendo de su contribución a la economía dominicana, subrayado cómo los incentivos fiscales incluidos en ésta han fomentado la inversión en dicho sector y cómo han apoyado el desarrollo social y cultural del país.

Por lo tanto, en medio del debate sobre una reforma fiscal inminente, la cual podría incluir la eliminación de incentivos, es igualmente importante analizar otras leyes que poseen incentivos fiscales y que han tenido un impacto profundo y positivo en la vida de los dominicanos.

En el contexto anterior, este breve artículo busca presentar un caso a favor de la permanencia de las exenciones de la Ley No. 171-07 sobre Incentivos Especiales a los Pensionados y Rentistas de fuente extranjera (en lo adelante, "Ley de Rentistas"), de la cual vale enfatizar que no solo beneficia a los extranjeros, sino también a los ciudadanos dominicanos pensionados o jubilados por instituciones de gobiernos de otros países, así como a aquellos que, sin ser pensionados, puedan demostrar que disfrutan de rentas fijas provenientes del exterior que cumplirían con las condiciones indicadas en la mencionada Ley.

Conforme lo anterior, esta normativa se consolida como una representación del "Sueño Americano" pero aplatanado para los dominicanos, siendo una oportunidad única para miles de dominicanos que han pasado años trabajando en el extranjero y que, nathalie gaal cumplir su sueño de regresar al país.

La llegada de estos dominicanos retirados, pensionados y rentistas extranjeros trae consigo un flujo constante de ingresos que, aunque no tributan sobre ingresos de fuente extranjera, su contribución al crecimiento económico del país se refleja impositivamente por la vía de los impuestos al consumo, p. ej. el impuesto a la transferencia de bienes industrializados y servicios (en lo adelante, "ITBIS") o el impuesto selectivo al consumo (en lo adelante, "ISC").

Sobre lo anterior mencionar que conforme el Ranking de Actividades Económicas 2022, emitido por la Dirección General de Impuestos Internos ( “DGII”), los impuestos indirectos, como el ITBIS y ISC, representaron el 46.4% del total de las recaudaciones, en donde el ITBIS constituyó el 24.2%, mientras que el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) aportó el 22.2; mientras que el Impuesto sobre la Renta (en lo adelante, ISR) generado por personas juridicas y fisica, tuvo una participación del 20.8% y el 13.3%, respectivaamente; Por su parte, los Impuestos a la Propiedad contribuyeron con un 7.2%, y el resto, que incluye intereses, multas e indemnizaciones, representó el 12.3% de las recaudaciones de dicho año.

Además, es relevante destacar que la Ley de Rentas no puede considerarse como una desventaja ni como una vulneración al principio de igualdad respecto a los pensionados dominicanos residentes en el país. Esto se fundamenta en el hecho de que la Ley 87-01 de Seguridad Social prevé una exención para las pensiones con un monto mensual inferior a cinco salarios mínimos, que actualmente asciende a 16,263 pesos dominicanos mensuales, lo que representa aproximadamente 975,000 pesos dominicanos al año. De esta manera, se garantiza que tanto los pensionados residentes en el país, como los beneficiarios de la Ley de Rentistas puedan acceder a condiciones que les permitan mantener una vida digna.

De este análisis, podemos concluir que, a pesar de que la Ley de Rentistas implica un sacrificio fiscal con relación a impuestos como el ISR e IPI, su impacto positivo se refleja en el aumento de los impuestos indirectos, que han generado una recaudación mayor en los últimos años. Esto demuestra que los beneficios económicos derivados de la llegada de pensionados y rentistas no solo superan el costo fiscal inicial, sino que también contribuyen significativamente al crecimiento y desarrollo de la economía dominicana, convirtiendo la ley en una herramienta clave para el progreso social y económico del país por medio de la inversión extranjera.