Que en 2023 tenga que titular un artículo de opinión de esta manera es sin duda preocupante, pero tenemos que seguir transmitiendo la información suficiente desde el terreno de la divulgación médica para crear ciudadanos cooperadores y conocedores de situaciones imprevistas en las que puedan actuar para socorrer. Desde luego, presenciar una crisis convulsiva es muy impactante. En estos casos, inmediatamente tenemos que intentar que la persona afectada se mantenga en una situación de seguridad y llamar a los servicios de soporte vital básico.
Por razones estructurales de la anatomía cerebral, algunas personas tienen una lesión denominada foco epiléptico en una zona del cerebro, donde hace una especie de cortocircuito que afecta a los movimientos, la conciencia y los esfínteres. La persona se desvanece, pierde la conciencia e inicia unos movimientos tipo descargas de manera generalizada. Muchas veces las denominadas crisis tónico clónicas son muy intensas y están acompañadas de salivación que parece espuma.
Hace unos días me enviaron un video de un joven que padeció una crisis en la vía publica y todos a su alrededor observaron como si fuese un espectáculo o una posesión demoniaca; lo miraban como si no se tratase de una persona, nadie le tocaba, no sabían cómo ayudar, pero miraban… Es la mezcla de miedo y morbo alrededor de una enfermedad que siempre ha tenido un mito asociado a su condición.
Mi profesor el doctor español Juan Coaullaut explica que, si queremos conocer la descripción de una convulsión, leamos la novela Los hermanos Karamazov, del gran escritor ruso Fiódor Dostoyevski, quien la presenta de manera insuperable. También lo hace de manera magistral Camilo José Cela en La familia de Pascual Duarte.
La epilepsia es una crisis que se controla con la medicación adecuada y un estilo de vida saludable (una buena higiene del sueño, evitar el alcohol…) y no tiene por qué limitar las actividades básicas y normalizadas de ningún individuo. Trabajemos, entonces, para desterrar el mito de que la epilepsia es contagiosa…