La consulta, aunque con algunos puntos oscuros en varias urnas, fue bastante exitosa.
Ahora analicemos las consecuencias de los resultados.
Primero, la vitoria de Abel Martínez fue arrolladora, lo que fue bueno para evitar dudas y controversias, cuando los candidatos salen muy emparejados. Obviamente, la FP y una parte del PLD bajo línea para que votaran por Abel.
Segundo, la carrera política de Margarita Cedeño llega a su fin con un deshonroso tercer lugar y una distancia abismal con el ganador. Tendrá que buscar tienda aparte porque en el PLD no tiene ningún futuro, o simplemente retirarse de la política.
Tercero, pero siempre los políticos intentan sobrevivir y difícilmente se retiren por lo que no dudamos que Margarita aspire a un curul en el congreso donde tampoco tendrá mucho éxito.
Cuarto, la sorpresa fue Domínguez Brito que quedo en segundo lugar superando a Margarita Cedeño, lo que lo convierte en el candidato ideal para acompañar en la boleta a Abel Martínez. Definitivamente la línea que bajaron los partidos a sus simpatizantes no inscritos, era sacrificar a Margarita.
Quinto, muchos hablan de la relación intima entre Leonel y Abel y ya se especula que podrían unir fuerzas para las elecciones del 2024. ¿Pero quien iría a la cabeza? Debería ser Abel, un candidato que nunca ha sido presidente y es una cara más refrescante, pero eso nunca pasara ya que Leonel es un enfermo patológico cuando del poder se trata.
Sexto, en tal escenario, el PLD nunca aceptaría unirse a la Fuerza del Pueblo con Leonel como candidato a la presidencia y menos ahora que se sienten renovados y fortalecidos.
Séptimo, Abel podría revertir la erosión de militantes que han emigrado a la FP por su descontento con el PLD, siempre que su liderazgo se afiance y pueda incorporar al Comité Político caras nuevas sustituyendo a muchos que tienen una larga cola de corrupción y están desprestigiados.
Octavo, Danilo Medina tratará de mantener el liderazgo del partido a pesar de su desprestigio, y Abel Martínez deberá luchar contra ese complejo dilema, porque el debería ser la persona, a partir de ahora, que asumirá la atención de los votantes del PLD y la línea a seguir en su partido. Eso puede acarrearle conflictos con la dirigencia, donde hay muchos que no simpatizan con su candidatura y lo ven como un testaferro de Leonel.
Noveno, El resultado pacifico de la consulta ha sido un trago amargo para Leonel Fernández, que apostaba a una confrontación y a un nuevo descalabro del PLD. Tendrá ahora que buscar militantes en otros partidos minoritarios.
Decimo, pero es muy posible que algunos militantes que apoyaron a Margarita, después de su derrota aplastante, se muden a la FP, incluyendo miembros del Comité Ejecutivo.
Onceavo, hay que ver lo que sucederá con el PRSC y el PRD, que ambos pueden aportar un 5% o 6% de los votos, nada despreciable. ¿Con quién se aliarán esos partidos? El PRD es posible que lo haga con el PLD y el PRSC con el PRM.
Treceavo, el escenario para las elecciones del 2024 ya esta definido. Tres candidatos de tres partidos diferentes. Luis Abinader en el PRM, Leonel Fernández con la FP y Abel Martínez con el PLD. Llegar a un 50% en la primera vuelta siempre es difícil con tres partidos relativamente fuertes, pero considerando la popularidad del presidente, no tengo dudas de que todo se definirá en primera vuelta aún se unan las dos fuerzas anteriores.
Catorceavo, ¿cuál será la diferencia de votos entre el segundo y tercer lugar? Si el PLD supera con creces a la FP, la carrera de Leonel termina y su partido tendrá que buscarse un nuevo candidato para el futuro, si quiere sobrevivir y no caer entre los partidos minoritarios.
CONCLUSIÓN
En la política dominicana es difícil hacer predicciones. Las zancadillas, traiciones, mala fe, transfuguismo y sobornos y promesas idílicas que no se cumplen, son factores para tomar en cuenta en el panorama político.
Ni Abinader ni Fernández, tienen fuerzas opositoras internas que signifiquen un riesgo a sus candidaturas, pero Abel Martínez tendrá que lidiar con un Comité Político que le puede hacer la vida imposible y crearle mucha presión. Los peledeistas se unen cuando están en el poder, pero se matan entre ellos cuando están en la oposición.