La empresa estadounidense SkyPower Global ha identificado a Pedernales, provincia del extremo sudoeste del territorio dominicano, como zona idónea para desarrollar un proyecto de manufactura local de paneles solares y generación de hasta 500 megavatios.
Buena noticia, siempre que el anuncio se traduzca en impacto positivo en términos medioambientales y de generación de empleos con salarios dignos para los provincianos. No solo del turismo debería vivirse.
La información fue ofrecida este 3 de enero a partir de una reunión virtual que el presidente Luis Abinader había sostenido con la embajadora dominicana en Washington, Sonia Guzmán, y una misión de empresas de capital estadounidense con interés de invertir en República Dominicana, como la Temple Allen Industries (equipos ergonómicos aeroespaciales), Ridge Parthers Línea Noroeste (reciclaje) y la SkyPower Global.
La ley 12 de 2021, que crea la Zona Especial de Desarrollo Integral Fronterizo, en su artículo 4 ofrece un mundo de facilidades a las empresas industriales, agroindustriales, agropecuarias, metalmecánicas, metalúrgicas. Supera con creces a la anterior 28 de 2001.
Incentivos: 100% del pago de Impuestos sobre la Renta, del Impuesto Selectivo al Consumo, aplicable sobre los servicios de telecomunicaciones y seguros para las instalaciones del proyecto ubicado en la Zona Especial; del pago de aranceles e ITBIS sobre las maquinarias y equipos objeto de importación o adquirida en el mercado local, requeridos para la instalación y puesta en operación de la empresa; del ITBIS para la adquisición e importación de insumos y materia prima utilizada en la producción de bienes; del pago del arancel para la importación de insumos y materias primas utilizados para la producción de bienes, solo cuando las mismas no se produzcan en el país; del impuesto de transferencia inmobiliaria y demás impuestos relacionados con las operaciones inmobiliarias sobre los terrenos e infraestructuras donde se desarrollare el proyecto calificado; de los impuestos, tasas y derechos de registros relacionados con el aumento de capital y transferencia de partes sociales en las sociedades.
También, exención de la obligación de retener e ingresar a la administración tributaria los pagos al exterior de servicios de innovación tecnológica requeridos por los proyectos, exclusivamente durante la construcción y puesta en operación
En este mar de facilidades, la maña ha sido la constante desde el primer día. Registran las compañías para operar en la frontera, pero las instalan en las metrópolis.
Un negocio redondo. Un robo. Un acto doblemente criminal porque engañan al Estado y se aprovechan de la ignorancia y de la pobreza material de los pobladores de la frontera con Haití. Y eso no se da sin contubernio.
Sólo hay que ver cuántas empresas bajo ese régimen operan en Pedernales tras dos décadas de aprobación de la ley.
Sobre el proyecto que SkyPower Global pretende ejecutar en esa provincia, el primer filtro de defensa debe constituirlo el Gobierno. Y el siguiente, la sociedad pedernalense, que ha de convertirse en veedora permanente de las inversiones para que no suframos los mismos males que con Alcoa, Ideal y Dovemco, entre otras.
Desde finales de los años cincuenta del siglo XX hasta el primer lustro de los ochenta, la compañía minera estadounidense la Aluminium of America (Alcoa Exploration Company), que operó desde Cabo Rojo, extrajo unos 40 millones de toneladas de bauxita de la reserva estimada en 50 millones. Con escaso control oficial, también exportó miles de toneladas de piedra caliza, materia prima esencial para la conversión de la bauxita en alúmina (información desconocida en Pedernales).
Según las informaciones, en las zonas exploradas y explotadas, en el área de Aceitillar (parque nacional Baoruco) quedaron 14 millones del mineral, a la hora de su salida. Los graves daños a la cordillera y a la zona de amortiguamiento están ahí como espejo tétrico. La Alcoa es el antecedente más cercano de empresa americana en este pueblo.
La “fiesta” ha seguido con Ideal y Dovemco, pese a la gran deuda de remediación ambiental y a la detección de las “tierras raras”, pero muy valiosas y caras; al casi nulo impacto económico en el pueblo y a operaciones en el corazón del proyecto de desarrollo turístico promovido por el Gobierno.
La gestión de gobierno actual ha estado diligenciando inversiones con la garantía de un clima de paz y de seguridad jurídica. Ha formado incluso el Gabinete de Promoción de Inversiones. Y es plausible que haya enfocado hacia nuestra provincia. Otros se hicieron los “chivos locos” mientras la gente se ha empobrecido progresivamente.
Además de desarrollo turístico, en honor a lo diverso, Pedernales necesita inversiones frescas en empresas no turísticas, siempre que respeten las leyes y demás normas nacionales y generen muchos empleos de calidad.
Y si la SkyPower Global va en esa dirección, bienvenida será. Y bienvenidos serán los empresarios locales y extranjeros que la emulen.