En mis batallas en la UASD como monitor, ayudante de profesor, catedrático y ejecutivo durante muchos años; también como gerente en la dirección académica y administrativa, he participado en los grandes eventos académicos, científicos, extensionistas y culturales, celebrados en la República Dominicana y fuera del país. Sin embargo, puedo decir que, en términos literarios, el Festival Centroamérica Cuenta RD es uno de los más trascendentes de todos en los que he participado.
Los miembros de las grandes delegaciones internacionales, con quienes me ha tocado compartir alguna conversación sobre cualquier tópico, una copa de vino o un poema, o las dos cosas a la vez -y esto es bueno- han expresado siempre, con alegría y admiración, que la República Dominicana es una tierra de poetas. Realmente no se equivocan. En las ferias internacionales del libro, que celebramos en el país, es donde más frecuentemente hemos escuchado esa apreciación sobre lo que somos.
Ningún lugar del mundo pudo haber sido mejor para celebrar el décimo aniversario del Festival literario Centroamérica Cuenta. La República Dominicana no ha sido seleccionada para festejar dicho encuentro por su proximidad geográfica y las ventajas comparativas, en términos comerciales, con los hermanos países centroamericanos y del Caribe o por la multilateralidad de acuerdos políticos y de comercio exterior sugeridos por parte de organismos internacionales. El Festival literario Centroamérica Cuenta se celebra en la República Dominicana, porque somos una tierra de poetas.
Pero también nosotros tenemos el privilegio de tener en nuestro suelo a ochenta figuras, de veinte países, del arte del más alto nivel internacional en las actividades propias de un evento de la dimensión de Centroamérica Cuenta: talleres formativos, diálogos; presentaciones y venta de libros; intercambio cultural; el valor de la escritura; ilustración; además, del abordaje de temas como el cambio climático, la democracia, América Latina y los cambios políticos, todos abordados desde la perspectiva de la ciencia y la literatura.
Y no podía faltar en este gran Festival literario Centroamérica Cuenta, uno de los más históricos y trascendentales, de límpida, patriótica, latinoamericanista y antillanista figura, como la de nuestro profesor Juan Bosch, a quien se le rinde un homenaje en el corazón mismo de este importante evento de la cultura.