Abel Martínez se catapulta bajo la consigna de “quien cambia una provincia, también cambia el país”, referida a Santiago de los Caballeros, por su exitosa gestión como alcalde en dos periodos consecutivos.

“Como su punto de apoyo” estratégico, como su “cabeza de playa”, necesariamente hay que dejar por sentado que se trataba de un territorio liberado, que “es lo bastante fuerte como para comenzar el avance ofensivo”.

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De las tantas acepciones que encontré sobre “cabeza de playa”, me quedo con un par de concepto que entiendo contribuyen a ilustrar sobre el término que proviene del lenguaje militar, y que lo definen como “punto de apoyo”, como una “posición militar que establece un ejército en un territorio para preparar el avance del grueso de las fuerzas”.

Aunque el caso que nos ocupa no se trata propiamente de una acción militar, aunque sí de una guerra en la que se usarán todas las estrategias que operan en el campo bélico, otros expertos aclaran que “cabeza de playa” es “un término usado para describir la línea creada cuando un grupo de unidades armadas alcanzan la costa y comienzan a defender dicha área hasta que arriban suficientes refuerzos”.

Y es ahí cuando los expertos marcan la raya de Pizarro al establecer que llegado el “momento en el que se crea una posición lo bastante fuerte como para comenzar un avance ofensivo”, que al retrotraerlo a la consigna de “quien cambia una provincia, también cambia el país”, se busca posicionar un “terreno liberado”, una “cabeza de playa” que se llama Santiago de los Caballeros, que se constituye en el “fuerte como para comenzar un avance ofensivo” al resto del país.

En ese búnker es donde está establecido el “comandante general”, Abel Martínez, desde donde se plantó para liderar la primera refriega, de la que salió ampliamente victorioso, y que al parecer sus estrategas entienden que tiene suficiente fortaleza para seguir avanzar en medio de escaramuzas que desde ya se están verificando, como preludio de la batalla frontal que se aproxima para afrontar “el avance efectivo”.

El peligro de hacer lo mismo…

Luego de esa contienda interna, parecería que sus estrategas le han recomendado mantener esa probada consigna con la que el ejecutivo municipal resultó victorioso en esa primera etapa, y al parecer han entendido que debería posicionarse en el electorado nacional vendiendo el referente de su exitosa gestión municipal durante dos períodos consecutivos.

Contraviniendo la frase lapidaria de Albert Einstein de “si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”, cuatro meses después del proceso interno del PLD, en torno al cuasi candidato presidencial, no se advierte un manejo estratégico para reposicionarse en el electorado nacional, más allá de “quien cambia una provincia, también cambia el país”.

Lo que catapulta a Abel Martínez es la consigna de “quien cambia una provincia, también cambia el país”, referida a Santiago de los Caballeros “como su punto de apoyo” estratégico, como su “cabeza de playa”, dejando por sentado que se tratada de un territorio liberado, un terreno que “es lo bastante fuerte como para comenzar el avance ofensivo”.

Pertrechos no llegan a “cabeza de playa”

El 16 de noviembre del año pasado, un mes después de la consulta ciudadana del PLD, evento interno en el que resulto cómodamente victorioso el alcalde Abel Martínez, publique un trabajo en Acento bajo el título “Ven estampidas de dirigentes del PLD le quitan lustre al proyecto presidencial de Abel Martínez”.

Al releer el referido trabajo, publicado el pasado año, descubro que lo que se describe y se advierte en el mismo, es exactamente lo que ha continuado ocurriendo, pero con mayor intensidad, y con la diferencia de que el epicentro del cismo se ha localizado en “cabeza de Playa”, del alcalde de Santiago.

(Por lo anteriormente expuesto, no me queda otro camino que reproducir algunos párrafos del artículo que durante más de una semana se mantuvo dentro de lo más leído en prestigioso digital):

“La estampida que continúa produciéndose en las filas del Partido de la Liberación Dominicana, a juicio de muchos, le quita lustre al proyecto presidencial 2024 del alcalde del Municipio de Santiago, Abel Martínez, luego de resultar electo en la consulta ciudadana efectuada por la organización morada el pasado 16 de octubre.

“Ese momento muchos lo vieron como trascendente y de gloria, y lo interpretaron como un “gran salto adelante”, y que sin duda alguna parecería que “echaría por tierra” los dos años difíciles y tortuosos que han mellado la imagen del PLD, tras la división que le costó la pérdida del poder, y el apresamiento y sometimiento a la justicia de funcionarios vinculados al pasado gobierno.