En medio de crisis migratoria que experimenta el mundo, los Estados Unidos, por medio del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y a través del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés), elaboraron una guía para ayudar a los no ciudadanos apátridas a obtener ciertos beneficios y facilidades.
Esta guía es de fundamental importancia, especialmente en estos momentos donde la incertidumbre agobia a todas aquellas personas que entran ilegalmente a esta nación y cuyo estatus migratorio es completamente incierto.
Muchos permanecen fuera del sistema, excluidos de servicios de educación, del trabajo formal, de un documento de estado civil o migratorio, sin asistencia administrativa, sin derecho a la identidad, a documentos de viaje, etc., porque no son ciudadanos de ningún lugar.
Es importante destacar que, como normativa a la apatridia, existen instrumentos de orden internacional de creados por Naciones Unidas para la protección de estas personas, como son la Convención del 1954, que creó el marco legal, y la del 1961 que establece normas para la concesión y el no retiro de la nacionalidad, para prevenir casos de apatridia.
Datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que “hay cerca de 218,000 personas que residen en Estados Unidos en riesgo potencial de apatridia”.
La recién creada guía es un instrumento legal y de garantía que trasciende aspectos de derechos humanos y más allá. Es de gran valor en los momentos actuales, cuando los estados de fuerte impacto demográfico y que están gobernados por los republicanos, están creando ordenanzas contra los migrantes.
La guía les proporcionará a los apátridas una herramienta de derechos humanos sin discriminación, para que puedan gozar de algunos derechos y libertades fundamentales.
Esta guía viene a otorgar una alternativa temporal a todos los procesos discriminatorios que enfrentan las personas en limbo jurídico.