Hemos visto con mucho agrado que en los últimos días se ha venido hablando en el país de que se está tratando de convertir a la Republica Dominicana en el Hub(Centro de conexiones) aéreo del Caribe, lo que indudablemente podría impactar favorablemente en la economía de nuestra nación.

 

En América Latina tenemos un ejemplo muy apropiado que podría servirnos de punto de partida y referencia por sus notables alcances y magníficos logros. Nos referimos al llamado Hub de Las Américas en el Aeropuerto Internacional de Tocumen en Panamá, lidereado por la línea bandera de este país, Copa Airlines.

 

Quizás para que el lector pueda ilustrarse, en este caso parecería conveniente, hacer una brevísima historia del desarrollo de este fenómeno de la aviación de nuestra región Copa Airlines.

 

Aunque Copa Airlines fue fundada en el año 1947, en el que inició con una aeronave DC-3, hasta la década de los sesenta, solo se dedicó a la realización de vuelos domésticos dentro del territorio panameño. A partir del 1960, expandió sus operaciones a la realización de vuelos internacionales en Sur América y Centroamérica y ya en 1970, abandonó el mercado doméstico y amplio sus operaciones a otros destinos de la región con la incorporación de una aeronave cuatrimotor Lockheed L-188 Electra.

 

En la década del 1980, adquiere su primer avión B-737-100, que le permitió ampliar nuevamente sus destinos a otros países de Sur y centro América, el Caribe y por primera vez hacia los Estados Unidos de Norteamérica y continuó adquiriendo otras aeronaves que la llevarían a contar con una flota de 26 unidades y ya en el año 1992, se abre el primer centro de conexiones de vuelos en Latinoamérica en el aeropuerto internacional de Tocumen en Panamá, “Hub de Las Américas”. Hoy día cuenta con una flota de mas de 100 aeronaves, con mas de 80 destinos en toda la región, proceso que como se puede ver le costó mas de cuarenta años. Como nota curiosa, en la década de los ochenta, esta línea era mas pequeña que la línea bandera dominicana.

 

Indudablemente, el proceso que a esta aerolínea le tomó mas de cuarenta años, hoy día pudiese reducirse tomando en cuenta los hiperbólicos avances de la ciencia y específicamente de la tecnología aérea, sin dejar de tomar en cuenta que los mercados requieren de tiempo y muchas labores de mercadeo para ser conquistados y sobre todo en un escenario bastante competido. Se ha tomado este ejemplo, por su apreciable similitud que podría tener con las iniciativas que hemos visto indicadas arriba que proyectan convertir al país en el Hub aéreo del Caribe.

 

Lo primero es que, lamentablemente en nuestro país, no existe actualmente ninguna línea aérea dominicana en operación con el potencial y proyecciones que pueda darle apoyo a un proyecto como este y creemos que aunque no es mandatorio o imprescindible que tengamos una línea aérea nacional que pueda hacer el trabajo que si se requiere para repartir el tráfico de pasajeros hacia los distintos destinos de la región, parecería muy cuesta arriba dejarle estas operaciones a líneas aéreas extranjeras que normalmente tienen otros objetivos y que además desarrollan sus operaciones regularmente con centro de conexiones en sus países de origen.

 

Si damos una mirada hacia otros destinos en la región y mas allá, se puede concluir que regularmente las aerolíneas nacionales, son las que tienden a constituir los Hub aéreo en cada uno de sus países, tales son los casos en Europa, del aeropuerto de Schiphol para KLM, el de Heathrow para British Airways, el

Charles de Gaulle para Air France, el aeropuerto de Fráncfort para Lufthansa y el de Madrid-Barajas para Iberia. En América Latina, se pueden citar, además, los casos del Aeropuerto Internacional de Ciudad México, centro de operación de Aeroméxico y Mexicana de Aviación, Aeropuerto Internacional El Dorado en Bogotá Colombia, centro de operación de Avianca, solo por señalar algunos.

 

En todas estas ciudades de Europa y América Latina, las líneas aéreas indicadas manejan mas del 70% de los pasajeros llegados y salidos en conexiones a otros países.

 

Tampoco se quiere decir que necesariamente el eventual Hub del Caribe, debería ser lidereado por una aerolínea dominicana, pero lo que ha enseñado la historia sobre el desarrollo de estos es que todos han tenido un factor común y es que están cobijados por líneas aéreas nacionales fuertes y con tradición.

 

Parecería que lo que tanto hemos venido pregonando con respecto al estímulo y desarrollo de la aviación comercial de nuestro país podría ir en consonancia con la proyección de una verdadera operación aérea nacional que pueda dar el soporte a esta magnífica idea del Hub del Caribe, de tal manera que podamos en el mediano plazo llegar seguros a la meta que nos propongamos.