Raúl Delgado Dueñas, del Departamento Derecho Internacional de Lealtadis Abogados, presenta un provocador artículo “El Libro Blanco sobre el futuro de Europa y los desafíos del Brexit”, disponible en el siguiente enlace: https://www.lealtadis.es/libro-blanco-futuro-europa-los-desafios-del-brexit/ . Ojo al desfase del “tempo” de este artículo: trata de los desafíos de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y no llega a la provocada por la invasión rusa a Ucrania. Pero, aún es útil para evaluar el futuro de la Unión Europea.
El autor trata la ingente cantidad de esfuerzo que el Brexit provoca a la Unión Europea en materia de legislación aduanera. Reduciendo su argumento, me concentraré en los cinco escenarios a los que ha reducido las opciones para resolver la cuestión.
Escenario 1: Seguir igual – La UE de los 27 se centraría en el cumplimiento de su programa de reformas de acuerdo con el espíritu de las orientaciones de la Comisión de 2014 «Un nuevo comienzo para Europa» y de la Declaración de Bratislava, aprobada por los 27 Estados miembros en 2016.
Escenario 2: Solo el mercado único – La UE de los 27 se centra gradualmente en el mercado único al no alcanzar acuerdos los Estados miembros en un número creciente de ámbitos.
Escenario 3: Los que desean hacer más, hacen más – La UE de los 27 sigue funcionando como en la actualidad, pero permite a los Estados miembros que lo deseen una mayor colaboración en ámbitos específicos, como la defensa, la seguridad interior o los asuntos sociales. Surgen una o varias «coaliciones de voluntades».
Escenario 4: Hacer menos, pero de forma más eficiente – La UE de los 27 centra su atención en aumentar y acelerar los logros en los ámbitos de actuación prioritarios que ha elegido, mientras que interviene menos en los que se percibe que no aporta valor añadido. Centra su atención y sus recursos limitados en un número reducido de ámbitos políticos.
Escenario 5: Hacer mucho más conjuntamente – Los Estados miembros deciden compartir más competencias, recursos y tomas de decisiones en todos los ámbitos. Las decisiones se adoptan con mayor rapidez a nivel europeo y se aplican con celeridad.
El autor cierra este primer capítulo remitiéndose al Libro Blanco, con estas palabras: «Esperemos que los debates y las decisiones que se acometan tras el libro blanco signifiquen una Europa más Unida y estable en definitiva más Europa, os dejamos el enlace al libro blanco: Libro blanco sobre el futuro de Europa»
Siendo así las cosas, me parece que la cuestión ucraniana, sumada a la cuestión polaca, agregada a la cuestión báltica de Suecia y Finlandia y culminando con que el reperpero de la OTAN que ha producido que la Unión Europea haya decidido –o, al menos, auscultado, las opciones sin llegar redactar a un Libro Blanco–, como sería: ¡reescribirlo todo! Es un escenario nuevo. Ser una potencia comercial, ser una potencial militar paneuropea y ser una potencia política.
El primer paso se dio al enfrentar la falta de gas y petróleo ruso y el segundo paso será cuando construya una solución europea que no tenga lazos políticos. Entonces esperaré que se produzca el primer Libro Blanco Europeo sin medias tintas. ¿Será mucha utopía esperarlo?