El Cuartel General en 1994; por SSGT Kit H. Hart; col. Department of Defense
El Cuartel General 12 de abril de 1930; col. University Of Florida.

El Cuartel General de las Fuerzas Armadas desempeñó un papel importante en el funcionamiento del Estado, desde la creación de la Gendarmería de Haití en septiembre de 1915. Durante más de una década, la sede del alto mando se llamó «Hotel de la Gendarmería». El edificio se inauguró el 3 de enero de 1927. Albergó los respectivos mandos de la Guardia de Haití (establecida en 1928), que se convirtió en Ejército de Haití el 29 de marzo de 1947, y luego en Fuerzas Armadas de Haití (FADH) el 4 de agosto de 1958.

Con su arquitectura austera, el Cuartel General parece haber definido su propia estrategia de supervivencia. Tras la desmovilización del ejército en 1995, se convirtió en ministerio en dos ocasiones (Asuntos de la Mujer; Cultura). Cuando se produjo el terremoto en enero de 2010, todos los edificios gubernamentales del vecindario se derrumbaron: el Palacio Nacional, el Palacio de los Ministerios, los cuarteles del batallón Dessalines, la Dirección General de Impuestos. El Cuartel General permaneció en pie, como si esperara tranquilamente la removilización de las tropas. Durante el régimen de los Duvalier (1957-1986), ser trasladado al Cuartel General era sinónimo para el oficial de caída en desgracia o sanción política. El poder y la riqueza del mando estaban en los batallones de élite. Se decía «un teniente de la Guardia Presidencial tiene más poder que un coronel del Cuartel General».

Al final del tercer párrafo del prefacio del Diccionario de bibliografía haitiana (1951), el autor Max Bissainthe agradece «al Cuartel General, cuya colección de periódicos fue de gran ayuda». Entre julio de 1941 y diciembre de 1956, la biblioteca de la Academia Militar y la del Cuartel General tuvieron el mismo administrador, Christophe Mervilus. La organización de bibliotecas en los espacios militares en el siglo XX, lleva la firma del general Antoine Levelt, jefe del estado mayor entre 1950 y 1956.
A partir de 1957, el Palacio Nacional empezó a pedir prestados a la biblioteca ejemplares del diario oficial, Le Moniteur. Generalmente, los volúmenes prestados permanecían en Palacio…

Cuando las tropas americanas se marcharon en 1934, el jefe de la Casa Militar del presidente de la República, el mayor Durcé Armand, tenía el control del batallón Dessalines, de la policía de Puerto Príncipe, de la Penitenciaría Nacional, del Palacio. Mandaba la cuarta parte de los efectivos del ejército. Tenía armas pesadas y depósitos de municiones, y se consideraba la autoridad militar suprema en Haití, con la bendición del presidente Sténio Vincent (1930-1941).  Su superior en el Cuartel General, el coronel Démosthène Calixte, no disponía de estos recursos.

Este patrón se repitió con François Duvalier (1957-1971), cuando los dos poderosos batallones (Dessalines y la Guardia Presidencial) estaban bajo sus órdenes directas, y todos los niveles estaban controlados por oficiales fieles. Jean-Claude Duvalier (1971-86) tuvo tres batallones de élite con la creación de los Leopardos. Cuando el presidente vitalicio Jean-Claude Duvalier tuvo que abandonar el país el 7 de febrero de 1986, entregó el poder al jefe del estado mayor. Las limitaciones estructurales y unas crisis muy complejas iban a cerrar poco a poco las puertas del Cuartel General. En abril de 1989, desaparecieron los tres batallones mejor entrenados de la historia militar de Haití en el siglo XX: el Batallón Táctico (1959-89), la Guardia Presidencial (1958-89) y los Leopardos (1971-89).

Desde el 17 de noviembre de 2017, el Cuartel General de las fuerzas armadas se está reestructurando en un país que «se asoma al abismo de una profunda crisis política y social» (El País).