La XXVIII Cumbre Iberoamericana ha dejado sentada en su Carta Medioambiental Iberoamericana su compromiso con las próximas generaciones. Esta carta constituye un referente común para enfrentar los desafíos ambientales globales que impactan la región como son el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación, la degradación de los suelos, la escasez de recursos hídricos, entre otros.

 

El documento ofrece un marco macro y se debe entender que las tareas propuestas deben ser asumidas por la más amplia diversidad de actores. Dentro de esta perspectiva, la multiplicación de pequeñas iniciativas representa un aporte fundamental en la mitigación y adaptación al cambio climático.

 

Las acciones que involucran a niños y niñas y se centran en la sensibilización y la asunción de compromisos juegan un papel particular al respecto.

 

La Fundación Abriendo Camino comenzó a desarrollar desde el año 2015, en Villas Agrícolas, un programa de educación ambiental que trasciende los límites de esta institución y que ha recibido el apoyo de empresas como Santo Domingo Motors y Motor Crédito.

 

Su coordinación de Educación Ambiental es liderada por la licenciada Estefanía Abreu y se propone reforzar las capacidades educativas de niños, niñas y adolescentes (NNA) de la comunidad.

 

La metodología usada para la educación ambiental es dinámica, lúdica, y se apoya en medios audiovisuales. Toma en cuenta en su implementación la atención, la comprensión, el manejo claro del lenguaje, la memorización, y contempla competencias y concursos.

El programa de educación ambiental de la Fundación es un ejemplo fehaciente de que, tanto en materia de educación como de medio ambiente,  los programas más sólidos son los que se construyen sobre experiencias aprendidas y buenas prácticas.

Actualmente cuenta con dos grupos de promotores del cuidado del medio ambiente, denominados “Brigadas 3R” y “Brigadas Verdes”, con edades que varían de los 6 hasta los 17 años. Se reúnen dos veces a la semana para capacitarse en materia ambiental y participar en actividades de concientización.

 

Mediante la propuesta “Yo reciclo desde casa”, y actuando desde sus hogares, los NNA están recolectando botellas plásticas, tapas y cartón, que se acopian en el centro.  Luego son entregados a la Fundación de Saneamiento Ambiental de la Zurza (FUNDAZURZA), que recoge todo el material acopiado.

 

Esta iniciativa se ha extendido de manera tesonera hacia los demás centros educativos del sector con la ambición de completar toda la geografía escolar de Villas Agrícolas. Por ejemplo, en el Centro Educativo Palacio Escolar España se capacitaron 800 estudiantes sobre el manejo de los desechos sólidos y los mismos estudiantes están realizando actividades de clasificación. Los desechos de esta escuela son recolectados por la empresa Polyplas de Villas Agrícolas.

 

En el Liceo Manuel Aurelio Tavárez Justo se capacitaron 273 jóvenes. Se instalaron cuatro puntos verdes, cada punto tiene dos tanques, uno para depositar plásticos y  el otro para  cartón y papel.

 

Desde el inicio de la propuesta “Yo reciclo desde Casa” el año pasado hasta el día de hoy, se han entregado 393.45 kg. de papel, 359.05 kg. de cartón y 776.83 kg. de plásticos a FUNDSAZURZA, sin contar la recolecta de la Escuela España.

Por otro lado, desde el huerto orgánico en azotea de Abriendo Camino, con la ayuda de la agrónoma María Sierra, que acompaña el proceso desde sus inicios, todos los niños y niñas de la Fundación, a partir de los 7 años, realizan siembras y trasplantes y también cosechan.

 

Con los productos cosechados en el huerto se realizan mercaditos para la venta y los participantes pueden también llevar a sus hogares parte de la cosecha.

 

Se impacta también las familias fomentando la agricultura sostenible e incentivando a la creación  de  huertos caseros con talleres  dirigidos a los padres, madres y tutores.

 

Dentro de esta línea se desarrolló un proyecto llamado Plantas medicinales, con el patrocinio de la Embajada de Francia en la República Dominicana, impactando 62 familias.

 

El programa de Educación Ambiental fomenta valores ambientales a temprana edad con el fin de inculcar actitudes que contribuyan a la conservación de la naturaleza y una mayor concientización sobre el cuidado del medio ambiente y el planeta.

 

Lo fundamental es que una nueva generación esté encabezando esas actividades. Es solamente de esta manera que se pueden cambiar hábitos y construir nuevas prácticas.