Hay un cuento muy viejo que hace alusión a dos posibilidades. En ese cuento, después de un gran recorrido, se concluye en una especie de círculo vicioso en torno a dos posibilidades.
Ahora que terminó la campaña y pasaron las elecciones resulta de alto valor recordarlo. Así podemos, además de repasar, usarlo como recurso para que aprendamos y logremos sobreponernos ante cualquier asomo de círculo vicioso.
Con la conclusión del proceso electoral se renueva la Presidencia y Vicepresidencia, 32 senadurías y 190 diputaciones, además de la renovación en el ámbito municipal. Como se recordará, en febrero escogimos 158 alcaldes e igual número de vice, 1,164 regidores y sus suplentes, y 235 directores y sus segundos, además de 735 vocales. Con la renovación de quienes han de conducir los destinos de la República Dominicana hasta el 2028 se abre oportunidad, preliminarmente, para dos posibilidades.
Desde el Gobierno Central se puede asumir la tarea de construir consenso, haciendo caso a lo planteado por el papa Francisco, en su mensaje de Pentecostés, en el que ha pedido tener la “valentía de cumplir gestos de diálogo”. Se puede gobernar para todo el país y conducirlo por la senda del bienestar. Por fortuna, el presidente Abinader ha adelantado que no se aprovechará de la sólida mayoría que ha logrado y que procurará consenso con las principales fuerzas políticas y sociales del país.
La otra posibilidad sería aplicar "campaña permanente" (Blumenthal, 1980), lo que implicaría concentrarse en cuidar el posicionamiento de la marca, así como el manejo de medios novedosos y medios tradicionales, para mantenernos entretenidos hasta el 2028.
Desde el Congreso Nacional se puede escoger entre abrazar la misión de “legislar, fiscalizar y representar” o, simplemente operar a modo de “sello gomígrafo”, ejercer como tramitadores de dádivas para acólitos, entre otros desmanes que se han vuelto costumbre en ese poder del Estado.
Desde los Ayuntamientos se puede asumir la misión para conducir nuestras municipalidades atendiendo el día a día mientras se mantiene el foco puesto en el municipio a construir. Se podría operar con criterio de “gestión eficiente, eficaz, transparente y participativa, en base a los principios de descentralización, desconcentración, concurrencia, coordinación y subsidiariedad” (Ley 176-07). O podrían optar por distribuirse el tráfico de influencia, conseguir lo suyo y entretenernos hasta el 2028.
La oposición política puede asumir posiciones críticas de cara a garantizar equilibrio en la conducción de la cosa pública, demostrando la diferencia en los hechos en los espacios en donde incide, o puede también atrincherarse y oponerse a todo lo que se proponga, aunque sea bueno, hasta que llegue el 2028.
La sociedad civil puede jugar un rol estelar de cara a seguir aumentando los niveles de criticidad en la ciudadanía o también puede aprovechar para que quienes tengan ciertas “habilidades” consigan alguna “lo suyo” y ayudar a entretenernos hasta el 2028.
El sector privado puede asumir la corresponsabilidad para aumentar la generación de oportunidades y bienestar o puede, desde ahora, aprovechar para conseguir muy buenos contratos, en buena o en mala lid, y hasta para invertir de cara a lo que podría pasar en el 2028.
Los medios pueden servir como plataforma ideal para mantenernos en foco de cara a lo que se ha pactado y establecido por Ley para el año 2030: “República Dominicana es un país próspero, donde las personas viven dignamente, apegadas a valores éticos y en el marco de una democracia participativa que garantiza el Estado social y democrático de derecho y promueve la equidad, la igualdad de oportunidades, la justicia social que gestiona y aprovecha sus recursos para desarrollarse de forma innovadora, sostenible y territorialmente equilibrada e integrada y se inserta competitivamente en la economía global” (Ley 1-12).
O también pueden ayudar a desviarnos de lo esencial, a que nos concentremos en chismes y rumores, a infoxicarnos cada vez más y a mantenernos entretenidos hasta el año 2028.
Como se puede apreciar, son muy diversos los ámbitos en los que, desde ya, preliminarmente tenemos dos posibilidades.