Hace varios días tuve la oportunidad de participar, como otras veces lo he hecho, en dos eventos importantes que trataron sobre el cambio climático, la gestión de riesgo y la comunicación en emergencias.

El primero, un diplomado sobre cambio climático y gestión de riesgo de desastre organizado por el Instituto Dominicano de Desarrollo Integral (IDDI); el segundo, un taller de comunicación en contexto de emergencia organizado por la Defensa Civil y apoyado por el proyecto Seibo Resiliente de la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ).

El diplomado estaba dirigido a personal de los ayuntamientos y organizaciones barriales, mientras que el taller fue impartido para directores de provinciales de la Defensa Civil de todo el país.

El diplomado “promueve una discusión sobre el impacto social de la acción climática en municipios y ciudades (migración interna y externa, presión sobre los recursos naturales, crecimiento poblacional e industrialización, el uso de suelo, etc.”, por el desafío que representa la gestión de riesgos climáticos en un contexto urbano.

El taller de comunicación en emergencias “fortalece las capacidades del personal provincial de la Defensa Civil en la implementación de una estrategia de gestión de comunicación en contextos de emergencias, con el fin de comunicar a lo interno y externo las informaciones generadas por situaciones de emergencias de manera rápida, convincente y veraz”.

He querido referirme a estas dos actividades porque si bien es cierto que los estragos del cambio climático están preocupando a nuestras ciudades, también los diferentes sectores de la sociedad, gobierno y organizaciones no gubernamentales, promueven en cada momento iniciativas interesantes que buscan hacer frente a los temas de sequía, inundaciones y otros hechos naturales y humanos.

Seguiremos dando apoyo e impulsando actividades como estas que nos permitan crear conciencia en la gente y prepararla mejor de cara al impacto del cambio climático. Choques del clima que se traducen en pérdidas de que afectan los medios que aseguran las necesidades vitales.

Capacitar a los directores provinciales y municipales de la Defensa Civil en el diseño de estrategias de comunicación, ajustadas a las emergencias, contribuyen a que cada provincia cuente con planes y protocolos de comunicación de gestión integral del riesgo de desastres para en un marco de emergencia informar de manera correcta a la población.

Por otro lado, el IDDI contribuyendo a la sensibilización del liderazgo social y político en el territorio, elevando la importancia de la defensa, cuidado y uso sostenible de los recursos naturales, un esfuerzo que permite tener en lo local un liderazgo social e institucional que acciona unido ante los fenómenos naturales.

Seguir avanzando en esa dirección, es desarrollar acciones que promuevan la forma de hacer gobernanza y gobernabilidad para una ciudad y municipio resilientes donde los actores del desarrollo entren en una dinámica constante de estudio y acción que les permitan comprender sus riesgos, organizarse para reducirlos, adaptarse a los cambios y crisis, y lo más importante, saber comunicar a la población.