En el vocabulario de las ciencias económicas se conocen los conceptos de deflación, inflación y reduflación, para referirse a las variaciones de los precios durante un período determinado. Estas variaciones traen como resultado el aumento o disminución del poder adquisitivo y en el costo de la vida de las personas que habitan en una determinada demarcación geográfica.
Desde los tiempos remotos son altamente conocidos los conceptos deflación e inflación. La deflación, no es más que una disminución en el nivel general de los precios durante un período determinado, y la inflación, es un incremento o alza en el nivel general de los precios. Cuando decimos en el nivel general, nos referimos a la generalidad de todos los bienes y servicios que se comercializan en una sociedad. La inflación se origina por dos causas fundamentales, que son: por un incremento en los costos de producción (materias primas) y por un exceso en la demanda total agregada, la que ocurre cuando los medios de pagos (dinero) con que dispone la sociedad sobrepasan la oferta total de los bienes y servicios (productos).
Ahora bien, existe una tercera causa para que se origine la inflación, y es la llamada inflación tipo espiral, que se produce cuando los empresarios se ven obligados a aumentar los salarios a los trabajadores, lo que trae como resultado una disminución de las ganancias de los empresarios, quienes se ven precisados a aumentar los precios de lo que producen, originándose una espiral inflacionaria, que es la de nunca acabar. Por un lado, los empresarios aumentan los salarios a los trabajadores, pero luego aumentan los precios de lo que producen, lo que hace que los trabajadores vuelvan a reclamar un reajuste salarial.
En América Latina en los últimos meses se ha estado viviendo una de las inflaciones más altas de los últimos tiempos, como consecuencia de la pandemia del Covid 19 y la guerra que libran Rusia y Ucrania. Es el caso de nuestro país donde la inflación ha sobrepasado los dos dígitos.
Las actuales autoridades han sido torpes en la aplicación de una política monetaria que contribuya a disminuir los precios. Por ejemplo, a comienzos de este año 2023 se aprobó una ley de tasa cero a 64 productos terminados, hecho éste que favoreció al gran importador en detrimento de la producción nacional, ya que el gobierno a lo que debió poner tasa cero es a la materia prima, como la soya, el maíz y otros insumos agrícolas, a fin de que el productor pueda producir a menos costo.
Como consecuencia de esa errada política aplicada por el gobierno del PRM y Luis Rodolfo Abinader Corona, la libra de arroz pasó de RD$25.00 a RD$40.00; la del pollo, de $45.00 a $90.00; el galón de aceite pasó de $299.00 a $700.00; la libra de habichuelas rojas de $45.00 a $90.00; la libra de bacalao, de $210.00 a 320 pesos, y los huevos de $3.00 a 8 pesos.
Observamos que en los últimos meses algunos empresarios, en procura de disminuir costos están aplicando lo que en economía llamamos reduflación, que no es más que disminuir el peso o la cantidad de los artículos, por ejemplo, disminución del peso del pan manteniendo el mismo precio, creando así una nueva forma de disminuir el poder adquisitivo de los consumidores.