“Conjunto de normas o consejos que, aunque no sean diez, son básicos para el desarrollo de cualquier actividad”.

  1. La palabra que habla no explica, actúa.
  2. Evite dramatizar, observe y haga.
  3. No “actúe”, trate de ser en escena, ese mandato es suficiente.
  4. No actúe ningún personaje, no lo busque en el texto. En usted habitan todos los personajes posibles.
  5. No invente situaciones, sea en ellas.
  6. No se emocione, deje que la palabra sea, y ella en sí es emoción.
  7. No responda en escena, escuche, diga lo que piensa y sienta respecto a lo que está escuchando.
  8. No se “mueva” si la palabra no le hace mover, retenga lo más que pueda y su acción será auténtica.
  9. No esté pendiente a la escena, sea parte de ella sin esfuerzo.
  10. Evite hablar pensando que está diciendo algo con sentido o sin él, comprenda y deje que su energía sea, y esa magia anulará su disturbio interno.
  11. No actúe sentimientos, esos artilugios siempre conducirán a construir estereotipos.
  12. Aunque esté representando a un histérico, no grite, que el viento más fuerte de un huracán arranca árboles de raíces, no sus hojas.
  13. No diga ningún texto de memoria, que la acción en sí no consiste en vomitar palabras.
  14. No busque situaciones en la totalidad anecdótica del libreto, que la esencia está en el detalle del drama.
  15. Mire cuando hable, evite el parloteo interno, que el silencio es la génesis de la acción.
  16. Si no puede “ver” en lo cercano, evite cualquier estrategia porque su acción será afectada por una creatividad mentirosa y ortopédica.
  17. No obedezca al director, comprenda y solamente así percibirá qué, cómo y cuándo hará lo que él le está indicando.
  18. No pare de actuar en un ensayo si el director no se lo indica, que lo que su ego percibió como una equivocación, el ego del director lo puede integrar como una virtud del montaje.
  19. No sea engolado en escena, la voz no actúa sino su presencia.
  20. No busque verdades en la literatura del libreto sino en lo que usted comprenda que debe hacer.
  21. No represente nada en escena, la apariencia es una trampa superflua que no le permitirá ver lo que hay detrás, que casi siempre es muy sutil.
  22. El público no existe, es una masa amorfa, usted debe inventarlo e integrarlo a la escena.
  23. Actúe para su ego, es la única manera de ser usted en escena y sentirse a gusto con lo que está haciendo. Pero cuídese del exhibicionismo.
  24. No busque decir en la forma, que la arquitectura no es solamente geometría, es también espacio vacío.
  25. Respire, respire, no piense y después hable.
  26. Actuar no es solamente decir, es saber estar diciendo.
  27. No ilustre la acción, sea en ella como la sangre es en usted.
  28. No interprete, explórese a sí mismo en la dificultad y será vivo en la acción.
  29. No busque en la acción del otro, que solo encontrará confusión y su inseguridad no le permitirá “ser”.
  30. No estudie ningún personaje, indíquele usted qué quiere hacer con él.
  31. No crea ni un segundo en lo que está actuando, ahí inician los vicios de la sobreactuación.
  32. La acción en sí no es movimiento, es ser creíble.
  33. La palabra dramática es acción en sí, no la actúe, solamente ocúpese de encontrarla y decirla bien.
  34. Un actor que no sabe decir, es como quien habla mucho y dice poco.
  35. La verdad escénica es un mito, porque siempre está buscando su razón de ser en la representación.
  36. El actor es dueño de una sola verdad: saber decir un texto.
  37. Actuar es como hablar en la vida diaria, pero sin mentir y fabular tanto.
  38. Interprete los signos de puntuación y la palabra encontrará su ritmo.
  39. Un signo de puntuación bien dicho, puede ser la detonación y la elegancia de un buen trozo dramático.
  40. La actuación que no silencia al público, es lo mismo que echarle agua a un barril sin fondo.
  41. Sea diciendo, es su mejor credibilidad.
  42. En escena usted no es un actor, es un personaje de la vida diaria sumergido en una situación cualquiera.
  43. No se engañe. No busque profundidad representativa, que el público pagó para disfrutar sin tener que pensar en lo que está viendo: La reflexión es un aderezo que puede llegar después.
  44. Sea lo que tenga que ser en escena, pero sea…
  45. La escena no es un ensayo, es la única oportunidad que tiene de involucrar en su mundo al público.
  46. Nunca intente enmendar un error en escena, que cuando su actuar es creíble, el espectador no es consciente de cuál fue el defecto.
  47. En escena no existe la equivocación, apenas una acción que salió de otra manera y usted no fue capaz de integrarla a la veracidad del drama.
  48. El personaje y usted son las mismas cosas, pero usted lo está actuando, pero él tiene que decir “diciendo” y haciendo.
  49. Actuar solamente tiene un principio, pararse frente al escenario y sea tan natural como usted discute o dialoga en la vida diaria.
  50. Actúe olvidándose del drama, hace lo mismo en la vida diaria.