Ignacio Miranda.

Mis conversaciones con el amigo Ignacio Miranda han sido innumerables; sin embargo, en esta ocasión he hecho un cuestionario de preguntas que él ha respondido.

Pregunta; ¿Cuál es tu pensamiento general?

Respuesta de Ignacio Miranda;

El ser, la identidad debe fundamentarse en la verdad y la fe. Como persona comprometida con la fe cristiana, creo que todo cristiano debe pensar, sentir, hablar y, sobre todo, actuar, de acuerdo a los principios de la doctrina cristiana. En general, creo que todo cristiano debe caracterizar por vivir la vida contemplativa, en mayor o menor proporción.

Asumir uno de estos dos comportamientos: activo en la contemplación o contemplativo en la acción: asumir la vida contemplativa, realizando trabajos concretos con la discreción de un ambiente limitado; o asumir el trabajo con la perfección de una oración.

Yo asumo el compromiso de trabajar buscando la perfección o, al menos, la excelencia: en consecuencia, creo que se me podría definir como humanista: austero, prudente, discreto, pacifista, maestro; si es una frase, mi hija me ha definido como: comunicador pedagógico.

¿Dónde y cuándo nace?

Najayo Arriba, San Cristóbal, 31 de Julio de 1934.

  1. e) Desempleado, desesperado por ir a la universidad, una noche me fue a la Iglesia y mientras

¿Por qué ha optado por vivir sin abundancia económica?

Porque junto a mi esposa e hijos valoramos la instrucción, el trabajo, la espiritualidad, la Iglesia fundada por Jesucristo, la naturaleza, por encima del poseer, poder, dinero.

¿Cómo nace en usted el deseo de luchar por los derechos humanos de los demás?

Nuestros padres nos enseñaron que ellos y sus ancestros estuvieron comprometidos con los valores del humanismo cristiano: justicia, libertad, valentía…

Educativos: Asociación de Profesores de la UASD; Fundador y Presidente de la Asociación de Profesores Retirados y Jubilado de la UASD (APREJUASD). Políticos: Partido Revolucionario Social Cristiano: secretario de organización, secretario de doctrina, secretario general; fundador y presidente del Partido Humanista Dominicano (PHD). Asesor del INFAS….

¿Cómo se podía ser dirigente social en tu juventud?

Con valentía y discreción. Por lo general, estimulado la Iglesia Católica y su doctrina.

¿Cuándo ingresaste en organismos de la Iglesia Católica?

A la edad de 9 años, como monaguillo, con los agustinos, en San Cristóbal, en 1943.

¿En cuáles momentos su vida peligró en el movimiento social?

Creo que en muchas ocasiones, pero el compromiso con la justicia social era más poderoso que el temor a la cárcel e incluso a la muerte.

¿Qué nos puede decir sobre las causas sociales que surgen dentro del apostolado de la Iglesia?

Creo que existe cierta inequidad en el pago de las retribuciones, a causa de la falta de instrucción en los valores de la DSI. Otras agentes pastorales, políticos, empresarios, usan a religiosos por falta de formación gerencial.

¿Qué opina usted de los sacerdotes católicos?

En general, son fieles a su vocación, su ministerio, su comunidad; la mayoría ignoran la Doctrina Social de la Iglesia (DSI) y, consecuentemente, la dimensión social del Evangelio que los encamina a un compromiso con la justicia, raíz de la equidad y vía real y permanente de la paz: son más los asistencialistas que los combatientes de las estructuras injustas y comunicadores de la DSI.

¿Cuál es la temática principal de sus libros?

El humanismo cristiano, enfatizando a identidad nacional.

¿Cuáles son sus personajes favoritos?

Jesucristo, San Pablo, San José, María de Nazaret, los profetas Daniel e Isaías; Cristóbal, mi padre y maestro; Antonia, mi madre; Tamara, Ignacio Antonio, Jorge Augusto, Flor Marfía: mi familia; San Juan Bautista, Juan Pablo Duarte, Francisco Sánchez y Del Rosario,  San Juan Evangelista, Tomás Moro, Jacques Maritain, Juan Bautista Montini (Pablo VI), Federico Ozanam, Arístides Calvani, Eduardo Frei Montalva, Aldo Moro, Robert Schuman, Giorgio La Pira, Enmanuel Mounier, Konrad Adenauer, San Lucas, Omar Khayyam, Rubén Darío, Antonio Machado, Eduardo Galeano,

¿Ha desempeñado usted algún cargo político?

En el país no, en Venezuela fui asesor del Ministerio de Promoción Popular, de forma itinerante.

¿Tiene usted alguna preferencia política?

Integralidad del humanismo cristiano, y, consecuentemente, trasciende el tiempo, el espacio: mi preferencia es el compromiso con el bien común.

¿Cuál fue el momento más difícil vivido en la lucha como laico?

Asimilé, a muy temprana edad, que se puede pasar por momentos difíciles, sin sufrirlo, porque mi pensar y sentir están animados por un horizonte de eternidad.

¿Tienes algún sueño por realizar?

Sueño sí, pero despierto, con los pies afincados hoy y aquí y con la mirada puesta en el infinito: Incentivar el esfuerzo por producir saludables y abundantes alimentos para el cuerpo y el alma: vale decir producir y compartir por un lado, víveres y frutas; y, por el otro, artículos y libros.

¿Cómo ve la iglesia en este momento?

Con gran riqueza doctrinal a nivel universal, regional y nacional, pero con una gran pobreza en la aplicación de sus valores.

Faltan maestros y comunicadores que enseñen su Doctrina y discípulos dispuestos a instruirse.

Eso dificulta que tengamos los gerentes que practiquen la dimensión social del Evangelio. Muchos dirigentes y dirigidos como se señaló en la IV Conferencia Episcopal Latinoamericana, celebrada en nuestro país, con motivo de los 500 de Evangelización: “Se sienten católico, pero no Iglesia”.

¿Cómo te divierte?

Hago de mi trabajo una diversión. Trabajo en lo que me guste. Mi preferencia es el magisterio a partir del criterio de ecología integral. Vivir en comunicación con las plantas, los animales y las personas, y, sobre todo, con Dios, mediante la oración, especialmente la Eucaristía.

¿Qué legado quieres dejarles a sus hijos?

Laboriosidad, fidelidad a la fe, identidad personal, libertad, educación integral, respeto mutuo, honestidad,

¿Cuál es su mensaje final, como laico católico?

Superar la superficialidad de lo que perciben los sentidos de ver-oír o leer-gustar-palpar, para penetrar en la profundidad de lo trascendente que, en definitiva, es la espiritualidad

¿Qué recomendación quiere hacerle a la juventud dominicana?

Descubrir su identidad personal a partir de las raíces culturales de la dominicanidad, que nace in-culturada por la dimensión social del magisterio de Jesucristo, en el que se inspiró nuestro Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte. En otras palabras, dar siempre primacía a su ser sobre su tener, no idolatrar a nada ni a nadie.

Quiero agradecer al amigo Ignacio Miranda, amigo de muchos años, las respuestas que ha dado a mis preguntas, que pueden considerarse como una buena conversación…