En el organismo humano disponemos del sistema inmunológico que se encarga de enfrentar las agresiones a nuestro cuerpo, por ejemplo, la entrada de gérmenes. Es una especie de ejército cuya función es protegernos. Edward Jenner hacia finales del siglo XVIII, descubre la primera vacuna, inoculando el virus de la viruela y comprobando que activaba al sistema inmune para que impidiera el desarrollo de la enfermedad, esto permitió prevenir la viruela y posteriormente eliminarla del planeta. Su descubrimiento tuvo un indiscutible valor científico, aunque sus métodos de investigación no fueron éticos. Evidentemente lo saludable es relacionarnos con elementos positivos, pero vimos cómo para enfrentar algo negativo nos exponemos de forma controlada a algo también negativo y logramos un efecto positivo.

Si quieres que tus hijos se sepan desenvolver, debes permitir que se expongan al mundo, aunque siendo supervisados. Si logras mantenerlos apartados de todos los riesgos posibles, nunca serán autosuficientes.  Si tienes miedo de morir ahogado, te convendría saber nadar, pero para aprender a nadar necesariamente tienes que sumergirte en el agua.

Los medios de comunicación constantemente están transmitiendo valores que podrían no ser los convenientes, es preciso poseer criterios sólidos de base para poder evaluar adecuadamente la información recibida, siendo esto posible mediante una correcta educación y buenos ejemplos.

Múltiples investigaciones de psicología social han mostrado de forma evidente que somos sumamente influenciables por nuestro entorno. Los animales presentan un patrón conductual instintivo, por lo que un perro separado temprano de la madre e incluso sin conocer a otros perros, se comportará como perro. Pero un niño, separado de sus padres y criado por perros, hemos descubierto que se comportará como perro y no como humano, porque nuestro tipo de aprendizaje es vicario, aprendemos por observación e imitación. Tu bebé siempre te está estudiando para saber qué hacer, por lo que es importante que decidas el tipo de información presente en tu hogar, comprendiendo que el niño registra tanto lo que le dices como lo que callas. Tu hijo aprenderá más de lo que vivas que de lo que digas.

Ayuda a que tu hijo perfeccione su vocabulario, el desarrollo del lenguaje está vinculado estrechamente con el desarrollo de la inteligencia. No celebres cuando se exprese de forma inadecuada, aunque te parezca gracioso.

Hablamos de algo que normalmente todos reconocemos: que el niño está en formación y aprende de su entorno. Pero conviene que sepas que: tú también eres muy influenciable. Las ideas ajenas entran a tu interior y si no las analizas, rebotan hacia al exterior pareciéndote que son tus propias ideas. Así como debes vigilar la información que entra en tu hogar afectando tu hijo, deberás vigilar también la que penetra en tu conciencia.

Observa bien tu entorno, qué oyes, qué ves, cómo son los que te rodean, qué piensas de tu país, porque todo eso serás tú, a menos que te ocupes de analizarlo de forma crítica. Hazte rodear por el ambiente que creas que te permitirá desarrollarte mejor.

Reflexiona si escuchas a menudo frases como: todos son malos, los honestos no progresan, la corrupción no tiene consecuencias, nadie dice la verdad, no hay esperanzas, es mejor no querer a nadie, etc. Es de vital importancia que comprendas que eres como la tierra y esas ideas, como semillas, pueden desarrollarse en tu interior. Escoge las semillas convenientes y cultívalas.

Las informaciones negativas también son necesarias, pero debemos limitarlas: algunos programas de televisión que no te aportan nada, películas con mensajes nocivos, el tiempo que dedicas a revisar noticias, la frecuencia con que participas de conversaciones tóxicas, etc.

Es de suma importancia que revises tus ideas nucleares sobre la cual has construido tus esquemas conceptuales, si están erradas, te pueden generar muchos trastornos emocionales, conductuales y sociales. Puede servirte de mucha ayuda el apoyo de alguien calificado que pueda acompañarte en ese proceso. Si piensas bien, actuarás adecuadamente y vivirás mejor, pero… ¿estás pensando bien?

Selecciona con inteligencia tus pasatiempos, con quiénes compartirás, qué leerás, tu tipo de recreaciones, qué clase de trabajo escogerás, cómo te relacionarás con los demás e incluye retos razonables en tu vida. “Perder” un poco de tiempo, a veces es una forma de ganar. Procura descubrir tus mejores capacidades, multiplicando en tu vida las experiencias de calidad. En pocas palabras, dedica tiempo para diseñar tu futuro, aunque sin olvidar tu presente.

Contagia sonrisas. Si lograras que la gente que te rodee esté alegre, definitivamente tu vida sería más agradable, por lo que ayudar a los demás es un signo de bondad, pero sobre todo de inteligencia. Analiza qué influencia ejerces en el mundo que te rodea y también analiza cuál te gustaría producir. Aunque no lo sepas, siempre has tenido el control.

Nuestros actos producen ondas vibratorias infinitas, todo lo que hagamos dará algún tipo de frutos porque todo tiene consecuencias, esas consecuencias las verás, pero no todas en el momento que creas. Libera tu luz y terminará la noche.