RECONSTRUYAN EL PUEBLO EN EL MISMO SITIO DE ANTES

Señor Presidente y Ministro:

En su aparente MAYORÍA, el pueblo de Las Terrenas desea que el calcinado Pueblo de los Pescadores sea reconstruído en el mismo sitio.  Parece ser que para la MAYORÍA no hay posible visión de un Pueblo de los Pescadores si no es en el mismo lugar.  La MAYORÍA señala que el Pueblo en ese sitio y en ese sitio solamente simboliza la historia, la cultura, el espacio, el sentimiento, la experiencia y la imagen de Las Terrenas.

Algunos argumentan que las consideraciones ambientales no son importantes en tanto que tanto el Ministerio de Medio Ambiente y el MITUR otorgan permisos y cartas de no objeción a proyectos de depredan otros recursos naturales.  Es obvio que en las mentes y corazones de la MAYORÍA existe una sola opción y es volver al espacio de antaño, donde están las memorias, los eventos y el “espíritu” del pueblo.

Esas ideas y sentimientos son legítimos.  Las personas que así se expresan lo hacen con pasión, con sentido de identidad, con certeza y con convicción.  No hay dudas en sus mentes, no hay realidades alternas y no estarían de acuerdo con perder su imagen de lo que fue, ni en aceptar una concepción diferente a la realidad.  Aunque nadie ha estimado científicamente los números de personas que piensan así, algunas personas notables entre los líderes sociales, políticos, económicos y de la sociedad en general aseguran que se trata de la MAYORÍA de los ciudadanos votantes en Las Terrenas.

Notablemente, la ausencia de una reconstrucción inmediata ha despertado las mayores críticas en contra del MITUR y del gobierno, porque muchos ciudadanos estiman que si antes fue posible reconstruirlo en tres meses que igualmente se pudo haber hecho ahora.   Desafortunadamente, la ausencia de noticias, de detalles y de una respuesta a la altura del trauma reveló cuán profundo son los sentimientos a favor de una reconstrucción ahí mismo y cuán amplio el rechazo a la ausencia de una resolución por parte del MITUR.  Las quejas abundan, reflejo fiel de la lealtad hacia el concepto que posee la MAYORÍA.

Es por esto que lo más expedito políticamente y lo más popular sería hacer lo mismo que hizo el ministro de turismo anterior, el que con dinero en mano, sin permisos ni estudios, reconstruyó el Pueblo después del primer incendio para alegría de todos y para ganancia política de su partido.  Si se desean los mismos resultados entonces ustedes, Señor Presidente y Señor Ministro, deben hacer lo mismo.

NO RECONSTRUYA EL PUEBLO EN EL MISMO SITIO DE ANTES

Señor Presidente y Ministro:

Nosotros en la MINORÍA, pensamos que reconstruir el Pueblo de los Pescadores en otro lugar más sustentable es posible, deseable y más juicioso.  Sería menos populista, pero representaría la defensa de los mejores intereses locales y nacionales.

La MINORÍA reconoce que sería contraproducente para el gobierno violentar sus propias leyes y reconstruir sin los permisos ambientales correspondientes.  Sería dar validez a la creencia de que el Estado es el primero en no cumplir con sus regulaciones y que, tal como en el viejo oeste, cada quien puede hacer lo que guste siempre y cuando tenga “al pueblo” apoyándolo.

La MINORÍA sostiene que hay suficientes informaciones sobre cambio climático y su impacto en el país como para argumentar que el lugar actual es de gran riesgo y que sería inmoral que el erario invierta 60-100 millones de pesos en un espacio que podría ser anegado o destruido por la naturaleza en los próximos 5-10 años, o antes.

La MINORÍA igualmente sostiene que el Pueblo de los Pescadores como tal dejó de existir hace mucho y que las condiciones cambiantes y de desarrollo de Las Terrenas podrían ser mejor utilizadas para crear algo mejor ajustado a esas nuevas realidades, con mayor variedad, nuevas ofertas y más amplias y mejores condiciones para un público diverso.

La MINORÍA argumenta que dado el uso intensivo de un espacio tal, el entorno no reúne las condiciones de tránsito, aparcamiento, seguridad, impacto ambiental y sostenibilidad que el Pueblo requiere en un municipio que en los dos últimos años ha explotado masivamente en la cantidad de turistas nativos y extranjeros que lo visitan.  Reconstruir en otro sitio no sería ni popular ni populista, pero sería lo más sensato y lo más adecuado a corto, mediano y largo plazo.

DADAS LAS POSTURAS ENCONTRADAS HAY UNA CONSIDERACION MUY RELEVANTE

Realmente no es necesario realizar una nueva vista pública cuando se sabe el sentir popular.  Si el objetivo de la vista pública es buscar aprobación ya la misma existe.  Si lo que se quiere es que voces opuestas se escuchen el evento podría ser un buen ejercicio y nada se pierde, pero se sabe desde ya el resultado final.

Sin embargo, el ejercicio de la vista pública como fue explicado no es ni democrático, ni representativo, ni objetivo, pero ayudaría a crear la impresión de que hubo una tribuna libre y democrática cuando, en realidad, sirve sólo para crear una excusa simple y expedita para justificar lo ya decidido.

Por otro lado, lo que el Estado carece es de informaciones más amplias, profundas y relevantes en cuanto a las condiciones del espacio y sus características, según la ciencia.

El MITUR ya ha actuado múltiples veces en Las Terrenas causando serios daños y en total sordera a los reclamos de la MINORÍA, como lo fue en el caso del sistema de desague sanitario y planta de tratamiento y también con el caso de los gaviones que comienzan a deteriorarse, entre otros.  Que lo haga una vez más sería de esperarse, pero recurrir a las evidencias científicas daría visos de mayor seriedad aunque no las siga.

Por lo tanto, propongo que el MITUR obtenga evaluaciones científicas por parte de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, de la Sociedad Ecológica del Cibao, de la Nature Conservancy, del CEBSE en Samaná, del Foro Ambiental de Samaná y de los técnicos y expertos del Ministerio de Medio Ambiente antes de una decisión final, lo cual podría ser realizado dentro de los próximos 30 días.  Luego, en base a las evidencias científicas obtenidas y en base a lo conocido del sentir popular, el MITUR tomaría una decisión no a ciegas, sino amparada por las evidencias, científicas o no.

Pienso que hacerlo así daría más propiedad al Estado y estaría a la altura de lo que se espera de todo gobierno juicioso que respeta sus propios reglamentos, normativas y que utiliza los recursos a su alcance para llegar a la decisión que más le conviene al futuro del destino.

El Estado es soberano y siempre puede actuar por decreto porque es su prerrogativa, pero una decisión tal que ignore el impacto ambiental y las evidencias científicas que resulten del estudio daría paso a serios cuestionamientos de juicio y de acción, sobre todo si ocurre un desastre o una pérdida notable de lo invertido.

El Estado no pierde nada esperando 30 días más y recolectando las evidencias científicas que puedan ser necesarias.  Una vez obtenidas, el MITUR puede llamar a múltiples vistas públicas para llegar a la diversidad de audiencias interesadas en la comunidad y si “el pueblo” decide en contra de lo que las evidencias científicas pudieran revelar entonces el Estado podría lavarse sus manos aunque eventualmente le cueste una pérdida de hasta 100 millones de pesos y una posible pérdida de prestigio.

https://terrenero.blogspot.com/2022/05/carta-abierta-al-presidente-abinader-y.html

Ver https://terrenero.blogspot.com/2022/05/potenciar-el-pueblo-de-los-pescadores.html

https://terrenero.blogspot.com/2022/05/el-pueblo-de-los-pescadores-ya-no-existe.html

https://terrenero.blogspot.com/2022/03/el-multiverso-terrenero.html