En textos anteriores, he mencionado brevemente algunos rituales de la época: saludar a casi todos los vecinos antes de salir del país, etc. Hay pocos testimonios fotográficos sobre la llegada al aeropuerto. Los que iban a tomar el avión estaban bien vestidos; los que acompañaban también. Un verdadero desfile de moda.
Mientras tanto, no he dejado de estudiar nuestra diáspora familiar y las demás. Los accidentes heroicos no bastan para construir un país. Somos tierra de exiliados, deportados y sobrevivientes. Con el tiempo, las fanfarronadas gubernamentales se desmoronan. «El país fue bueno» en cierta época, afirman unos. Cuando te pongas a indagar sinceramente, te darás cuenta de que en Haití la mentira es una virtud histórica. El periódico Le Nouvelliste del 14 de noviembre de 1966 nos informa en primera página otro capítulo de las relaciones de ayer entre Haití y la República Dominicana: la diplomacia de la zafra azucarera… Con bombos y platillos, los gobiernos se reunían en el salón de la cancillería, para la firma del contrato anual con el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) para el corte de la caña. Los trabajos documentados sobre la generosidad financiera dominicana hacia los políticos haitianos aún no han visto la luz. Sin embargo, entre diciembre de 1958 hasta el asesinato de Trujillo en mayo de 1961, [… ] el Presidente François Duvalier ganaba entre 6 y 8 millones de US en la venta de braceros» Fuente: UNITED PRESS INTERNATIONAL. Revelan contrato entre dictadores Duvalier y Trujillo.Listín Diario, LXXVI, (17745). 23 agosto 1964: p. 3.
A principios de los años 80, cuando me enteré que un cabo de las fuerzas armadas residente en el sector de la Plaza de Santa Ana de nuestra capital mató a su esposa y luego se suicidó, le pregunté a tu abuelo «¿cómo es posible?». Me contestó con una pesada mirada silenciosa. Yo tenía que ir al vecindario del cabo para comprender mejor. Al volver a casa, mi relato fue corto:- Papá, el cabo y su mujer murieron de miseria.
El régimen de los Duvalier debe ser estudiado con mucha precaución. Considerado durante mucho tiempo como «mal gobierno», se ha impuesto -gracias a la estupidez de los sucesores- como el único referente de las escasas realizaciones de la historia haitiana. Dos patriarcas (Mc Intosh y Bayard) que tuvieron la confianza respectiva de Duvalier padre y del hijo heredero han escrito en mayúsculas la historia de los vuelos comerciales en nuestros cielos desde hace casi 60 años.
El 3 de noviembre de 1967, el tío Fefe se fue con la Pan Am (Pan American World Airways) hacia Nueva York. Cuando lo visité en N.Y. a finales de los 80, en compañía de mi hermano Charles, la Pan Am ya era casi un recuerdo en los cielos del planeta.
Notas: Entre 1915 y 1934, Georges Anglade estima que entre 200 y 300.000 haitianos habrían estado trabajando en la República Dominicana y el doble en Cuba.
Entre 1957 -año de la llegada al poder de Papa Doc- y 1963, 6.800 haitianos entraron en los Estados Unidos con un visado de inmigrante y otros 27.300 con un visado temporal. Fuente: La diáspora haitiana, autor Cédric Audebert, Open Edition, 31 de enero de 2017.