Recientemente el movimiento LGTBIQ+ celebro su caravana del orgullo numero 16 con la celebración continua durante 16 años de caravanas del orgullo que tienen la particularidad de combinar actos sociales, caminatas, recorridos en vehículos por distintas zonas de la ciudad de Santo Domingo donde se incluye a varios barrios marginados y un concierto.
El movimiento LGTBIQ+ en la República Dominicana ha ido creciendo y expandiéndose lo que se muestra en la celebración del orgullo donde participan personas de distintas identidades de género y orientaciones sexuales y generaciones. Este crecimiento del movimiento también se muestra en su visibilización con rupturas de los tabúes, practicas y manifestaciones de intolerancia y discriminación que viven las personas del colectivo LGTBIQ+ cotidianamente tanto en sus familias como en el ámbito laboral, social y político.
Las caravanas del orgullo son actividades festivas y afectivas, espacios de libertad, expresividad de las personas con orientaciones sexuales diversas donde pueden ser ellas mismas sin la represión y el tabú del control social. En la caravana se presentan carteles que demuestran esa necesidad de respeto a los derechos de “ser tu misma o tu mismo” sin sufrir represión y maltrato. “Es el único día en el que siento que puedo ser yo sin miedo a que me miren ni me digan nada”.
La existencia de esta necesidad de libertad y de identidad en la población es creciente sobre todo en las nuevas generaciones.
Las celebraciones del orgullo LGTBIQ+ desde sus distintas manifestaciones festivas y afectivas fortalece la democracia y las libertades en nuestra sociedad.
Junto al carácter festivo de la caravana se encuentran las demandas de las distintas organizaciones de personas : Lesbianas, Gay, Transexuales, Bisexuales, Intersexuales, y Queer con respecto a que se haga justicia con los 17 casos de personas que han sido asesinadas por tener una identidad de género distinta y el sistema judicial no le ha dado seguimiento ni ha resuelto estos casos durante estos últimos 16 años. Igualmente, la necesidad de que se apruebe la ley de no-discriminación para que se penalicen las prácticas de exclusión, discriminación y maltrato a las personas por su orientación sexual, color de la piel, nacionalidad, condición de discapacidad, identidad de género, desde los centros educativos, universidades, centros de salud, espacios laborales y comunitarios.
Estas prácticas erosionan el carácter democrático que constitucionalmente define la sociedad dominicana y no cuentan con su penalización.
Las celebraciones del orgullo LGTBIQ+ desde sus distintas manifestaciones festivas y afectivas fortalece la democracia y las libertades en nuestra sociedad. Convierten el espacio público en un lugar donde fluye la expresividad y la creatividad.
La lucha por el respeto de los derechos de las personas LGTBIQ no es un problema exclusivo de este sector, beneficia a toda la ciudadanía en el ejercicio de sus derechos y libertades. Es un movimiento que reclama el derecho a la libre expresión de la afectividad, a la eliminación de la discriminación y exclusión, dimensiones trascendentales en todas las personas.
En los países democráticos existe la penalización y un régimen de consecuencias para las practicas discriminatorias y de exclusión hacia las personas por su : identidad de género, orientación sexual, color de la piel, migrantes, jóvenes, personas con discapacidad y mujeres. Urge en nuestro país que se apruebe la ley contra todo tipo de discriminación para que la democracia realmente sea efectiva según se establece en la constitución de la Republica.
Este articulo fue publicado originalmente en el periódico HOY