Los sistemas de gestión de riesgos de desastres, en todo el mundo, tienen enormes retos de mejora en sus capacidades. Nuestro Gobierno muestra interés en ayudar a las entidades de emergencias y ha expresado públicamente contribuir en su avance.

En la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) y en la Defensa Civil (DC), por ejemplo, se perciben cambios en la forma de hacer las cosas. Los temas que son abordados permiten seguir adelante en un constante y sostenido proceso de mejora.

“Las instituciones son organizaciones compuestas por humanos e implica relaciones estables y estructuradas entre los individuos que la conforman, con el fin de cumplir una serie de objetivos claramente definidos”.

Determinada la ruta a seguir y la meta a lograr, se emplean los recursos humanos, financieros, estructuras, leyes y reglamentos. Hasta el comportamiento de las personas, para saber si es posible conseguir lo planificado, son determinantes.

En ese mismo orden, “los sistemas son procedimientos, métodos, modos, costumbres, prácticas, estilos, vías, técnicas, ordenanzas, normas, planes, reglas, régimen de consecuencia, gobierno, respeto, organización y estructura”.

Las instituciones y sistemas sirven para obtener algo con un fin; los que trabajan en el sector público y privado sabemos que sin uno de esos dos elementos no se obtiene nada. Los que integran una institución o un sistema no ven el espectro de la misma manera.

Las miradas pueden darse a partir de los comportamientos de los elementos; unos marchan de manera independiente y otros van unidos, sin embargo, siempre deberán formar parte de una estructura mayor.

A los que dicen que el sistema de prevención, mitigación y respuesta “va marcha hacia atrás” se le aclara que caminamos hacia delante en la actual administración pública. Obviamente, es de preocupar e inquietar esa opinión puesto que, desde el ejecutivo se hacen ingentes esfuerzos para avanzar.

La psicología de los grupos explica los procesos, las relaciones, formaciones, roles, normas, integración y comunicación entre los componentes de un sistema.  Y para poder comprender la posición antedicha, me apoyaré en la ciencia de la sicológica social apuntar lo siguiente:

  • Si a lo interno del sistema un elemento se resiste a ver las cosas buenas que se hacen, y se cree superior por experiencias acumuladas, con una sobre estimación de sí mismo, aire de grandeza, poder y se atribuye habilidades que él se cree son enormes. Sin lugar a dudas el sistema se encuentra frente a un problema pendiente de resolver. Y si la posición es grupal, entonces el asunto amerita de una solución urgente.
  • Si el que observa no ve las luces y se ocupa de las tareas que logran sus objetivos individuales, sin importarle la productividad y el rendimiento, sino el estatus que se logra por realizar lo que hace, estamos frente a elementos que consideran que el éxito les pertenece.
  • En las estructuras se organizan las relaciones, se comparten en armonías las ideas y se construyen los planes para avanzar en los propósitos comunes. El que anda por su lado, en dirección contraria, tiene que reorientar su norte, y no debe hacerlo apartado de las acciones definidas por la dirección.

Finalmente, para modificar la idea de una posición desacertada, que muestra falta de alineación, se tiene que crear un equipo capaz de sanar el área y persistir en el valor de un ejercicio de repaso de las leyes y conceptos que ordenan el sistema. Promover una práctica de investigación acompañada de una lectura comprensiva de contenidos, tirar páginas a la izquierda…